Enlaces accesibilidad

La justicia británica mantiene en vigor la orden de detención contra Assange por vulnerar la libertad condicional

  • Suecia ha cerrado la investigación contra él y ya no reclama su extradición
  • Así, sus abogados esgrimían que la orden de detención ha "perdido su propósito"
  • Pero al refugiarse en la embajada de Ecuador no acudió a un citación judicial
  • El tribunal considera que violó los términos de su libertad condicional en el país

Por
Reino Unido confirma la orden de detención contra Julian Assange

Un tribunal británico ha decidido mantener en vigor la orden de detención que pesa sobre el activista Julian Assange, pese a que Suecia ya ha cerrado el caso por el que le reclamaba, al considerar que el australiano vulneró los términos de su libertad condicional al refugiarse en la embajada de Ecuador en Londres, en la que se encuentra desde 2012, y no acudir a una citación judicial.

La juez de la Corte de Magistrados de Westminster Emma Arbuthnot ha dictaminado ante una sala repleta de público que el fundador del portal de filtraciones WikiLeaks, de 46 años, debe responder todavía por haber vulnerado los términos de su libertad condicional cuando se encerró en la legación diplomática ecuatoriana.

Assange, de 46 años, no se presentó ante un tribunal que requería su presencia el 29 de junio de 2012, pocos días después de haberse refugiado en la embajada, una ofensa que puede acarrear una pena máxima de un año de prisión en el Reino Unido.

"No estoy convencida de que la orden deba levantarse", ha explicado la magistrada. "Si no aporta una causa razonable [para no haberse presentado ante el juez] será culpable de un delito", ha señalado, antes de apostillar: "Una vez esté ante un tribunal, el acusado tendrá la oportunidad de argumentar esa causa razonable".

La fiscalía sueca archiva la investigación contra Julian Assange por un supuesto delito de violación

Nueva revisión en una semana

El equipo legal de Assange había alegado que la orden de detención "ha perdido su propósito", puesto que la Fiscalía sueca decidió hace ocho meses cerrar la investigación preliminar abierta por un supuesto delito de violación en 2010 que sustentaba la petición de extradición, y que motivó que el fundador del portal de filtraciones WikiLeaks se refugiara en la legación ecuatoriana.

Los abogados del activista australiano pueden recurrir ante instancias superiores esa decisión, aunque por el momento han presentado nuevos argumentos a favor de retirar la orden, que consideran un castigo desproporcionado "en contra del interés público". La jueza Arbuthnot ha prometido evaluar esa circunstancia y volverá a prounciarse al respecto el próximo martes, 13 de febrero.

En cualquier caso, Assange no parece dispuesto a aceptar la invitación de la magistrada para que se explique ante la justicia británica por haberse ausentado de la citación judicial, ya que teme ser detenido y extraditado a Estados Unidos, que quiere interrogarle por la filtración de miles de cables diplomáticos e información confidencial a través de WikiLeaks.

De hecho, su equipo legal ha criticado que las autoridades de Reino Unido declinen confirmar o negar si Washington ha enviado a Londres una petición en ese sentido. Así que el australiano "continúa dispuesto a responder ante la justicia británica en relación a la ruptura de la libertad condicional, pero no a costa de afrontar una injusticia en Estados Unidos", ha recalcado este martes una de sus abogadas, Jennifer Robinson.

El fundador de WikiLeaks, el australiano Julian Assange, ha calificado de "victoria histórica" la decisión de la ONU que condena su detención de más de cinco años en Londres, en un mensaje desde el balcón de la embajada de Ecuador, donde está refugiado desde 2012. Assange, dirigiéndose a una multitud congregada ante el edificio en el barrio de Knightsbridge, ha instado a los Gobiernos sueco y británico a respetar el dictamen "vinculante". "Es una decisión histórica para mí, mi familia y mis hijos", ha dicho el exhácker, que ha aplaudido también la independencia de la ONU. Un comisión de Naciones Unidas ha dictaminado que su detención es "arbitraria" y ha instado a Londres y Estocolmo a que pongan fin a su detención.

Cinco años y medio asilado en la embajada

El fiscal general estadounidense, Jeff Sessions, sostuvo el pasado abril que el arresto de Assange es una "prioridad" para el Gobierno de EE.UU. Este martes, en un comunicado, WikiLeaks señala que el activista puede afrontar una condena "de por vida" en Estados Unidos por "múltiples cargos", incluidos espionaje, conspiración para cometer espionaje, robo y espionaje electrónico.

En un intento de desbloquear la situación, el Gobierno de Quito le concedió en diciembre la nacionalidad ecuatoriana y pidió para él estatus diplomático. Sin embargo, el Ministerio de Exteriores británico le ha negado ese estatus diplomático y ha recalcado que el "caminó para resolver este problema pasa por que Julian Assange abandone la embajada y se enfrente a la justicia".

La defensa del australiano ha lamentado durante la sesión de este martes ante el tribunal que Assange lleva cinco años y medio en unas condiciones que "bajo cualquier punto de vista, son similares a un encarcelamiento".

No tiene acceso a cuidados médicos adecuados ni a la luz del sol, unas circunstancias que han deteriorado su salud

"No tiene acceso a cuidados médicos adecuados ni a la luz del sol, unas circunstancias que han deteriorado su salud física y psicológica, que se encuentran en serio peligro", han aducido sus abogados. En junio de este año, si persiste la actual situación, Assange cumplirá seis años asilado en la embajada de Ecuador en Londres.