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España se reserva hasta el último minuto su apuesta para la vicepresidencia del BCE

  • El nombre en todas las quinielas es el del ministro de Economía, Luis de Guindos
  • El ministo elude hablar de si será él el candidato y el PSOE pide que sea una mujer
  • De Guindos: Hay "elevadísimas" probabilidades de que España regrese al BCE

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El Ministro de Economía, Luis de Guindos, en el Congreso de Diputados
El Ministro de Economía, Luis de Guindos, en el Congreso de Diputados

El Gobierno no desvelará hasta este miércoles si presenta al ministro de Economía, Luis de Guindos, como candidato a la vicepresidencia del Banco Central Europeo (BCE). España mantiene así la incógnita sobre a quién presentará a un día de que termine el plazo para postularse mientras aumenta desde Bruselas y en Madrid la presión para que apueste por una mujer.

El Gobierno ha anunciado que presentará un candidato al puesto y aunque no ha revelado por quien optará, el nombre en todas las quinielas es el del ministro de Economía, Luis de Guindos.

El PSOE defiende, sin embargo, que sea una mujer con "perfil técnico" la que sustituya en el cargo al portugués Vítor Constancio a partir del 31 de mayo y condiciona su apoyo a que así sea. Los socialistas se hacen eco así de la llamada de la Eurocámara a los países del Eurogrupo para que presenten una lista de aspirantes con "equilibrio de género".

Preguntado este martes en el Congreso sobre si será el candidato, Luis De Guindos ha emplazado a los periodistas a esperar a este miércoles y se ha limitado a subrayar la importancia de que España regrese a la Comisión Ejecutiva del BCE al margen de quien sea el propuesto, y se ha mostrado convencido de que hay probabilidades "elevadísimas" de lograrlo.

Ha recalcado que el candidato con quien debe ser consensuado es con el resto de países de la zona euro y no ha querido entrar en polémicas por las condiciones impuestas por el PSOE para apoyar la propuesta del Gobierno.

"No voy a entrar en valoración de condiciones de terceros", ha afirmado Guindos, que ha insistido en que lo importante es que España regrese a la Comisión Ejecutiva (CE), un puesto que perdió a principios de 2012, cuando la situación de España era "muy difícil". "Lo importante es que España vuelva a donde no tenía que haber salido", ha añadido.

El titular de Economía ha subrayado que ese debería ser el objetivo de todos, porque el BCE "va a tener que tomar decisiones muy importantes y, evidentemente, siempre es fundamental tener presencia en los organismos internacionales".

España contará al menos con un rival

Por el momento, España sabe que contará con al menos un rival: el gobernador del Banco Central Irlandés (ICB), Philip Lane, a quien el Ejecutivo de Dublín ha anunciado como candidato.

El presidente del BCE, el italiano Mario Draghi, que este lunes debatió con el pleno del Parlamento Europeo, no se pronunció sobre el tema pese a las interpelaciones de los eurodiputados. El grupo de los Verdes, por su parte, ha expresado reservas ante la posibilidad de que el candidato sea De Guindos, por tratarse de "un político en activo que pasará a ocupar un puesto importante sin escrutinio democrático directo", dijeron en un comunicado.

El tratado de la UE solo exige que los miembros del comité ejecutivo sean "personas de reconocido prestigio y experiencia profesional en asuntos monetarios o bancarios".

Sin embargo, en una institución cuya independencia política está consagrada en los tratados, nunca se ha dado el caso de que un exministro pase directamente a la directiva.

Visto bueno definitivo a finales de marzo

Este miércoles se conocerán los nombres de los candidatos y el 14 de febrero la comisión de Economía de la Eurocámara mantendrá reuniones a puerta cerrada con ellos, antes de que el día 19 el Eurogrupo nombre a uno.

El Parlamento organizará después una audiencia con el elegido y el BCE -que nunca se ha opuesto a un nominado- dará su opinión, aunque sus veredictos no son vinculantes y no podrían vetar el nombramiento.

El día 20 los ministros de Economía de los Veintiocho (el Ecofin) harán la designación formal y los líderes de la UE tendrán que dar el visto bueno definitivo al nombramiento en su cumbre del 22 y 23 de marzo.