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Juicio Fórum Filatélico

Un acusado de estafa y blanqueo en Fórum no reconoce su firma y habla de "suplantación"

  • Juan Miguel García Gómez era responsable de la red de proveedores de sellos
  • Colaboraba en el entramado societario para desviar fondos al extranjero

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Sede de Fórum Filatélico en Madrid
Sede de Fórum Filatélico en Madrid.

Juan Miguel García Gómez, acusado de estafa y blanqueo en el juicio por la quiebra de Fórum Filatélico, ha negado tener capacidad de decisión sobre las sociedades pantalla a las que se desviaba dinero de la sociedad, no ha reconocido su firma en varios documentos y ha hablado de "suplantación".

García Gómez, para el que la Fiscalía solicita cuatro años de cárcel y 72.000 euros de multa por estafa y otros cuatro años y 10 millones de euros de multa por blanqueo, ha atribuido toda la responsabilidad al empresario Carlos Llorca, huido en Venezuela.

Según la Fiscalía Anticorrupción, éste era uno de los máximos responsables de la red de proveedores de Fórum, y controlaba los complejos circuitos financieros a través de los cuales se desvió al extranjero una gran parte de los fondos captados a los clientes.

Admite que era apoderado

García Gómez admite que figuraba como apoderado de varias sociedades pero no ha reconocido que ejerciera ninguna función concreta, ya que era Carlos Llorca "el que llevaba el día a día de las cuentas, el que se ocupaba de todo".

De hecho, y aunque su nombre aparece en extractos bancarios, ha insistido en que aunque era titular de algunas de ellas "no estaba autorizado en muchas de ellas", y no tenía poder para firmar nada, sugiriendo además que "se han inventado cosas".

La versión de García Gómez contradice las tesis de la Fiscalía, que sostiene que era un auxiliar de Llorca y su colaborador en el entramado societario con el que se desviaban los fondos de Fórum.

Sociedad intermedia para encarecer los sellos

El acusado instó la creación de la sociedad Premium Stamp, con sede en el Reino Unido y domiciliada en la vivienda de Pamela Randall, acusada de estafa en la causa y para la que se piden cuatro años de cárcel; en ese domicilio radicaban más de un millar de sociedades.

Se trataría de una sociedad intermedia entre Fórum y sus proveedores de sellos, en concreto con una de ellas, Crimpen, para encarecer el precio de los sellos; proporcionaba sellos hasta a tres proveedores de Fórum, que vendían a ésta con incrementos del precio cercanos al 10%.

Según el escrito de acusación, Premium ingresó cerca de 52 millones de euros de Fórum, y de esta cantidad 45,4 millones de euros fueron a parar a una cuenta de Pamela Randall en Royal Bank of Scotland, y posteriormente a cuentas controladas por García Gómez y Llorca.