Enlaces accesibilidad

El Gobierno luso intenta calmar las protestas con ayudas a las víctimas de los incendios

  • Miles de personas se han manifestado en Lisboa y otras ciudades del país
  • Han exigido medidas urgentes que eviten nuevas tragedias
  • 108 personas han perdido la vida por los fuegos en un plazo de cuatro meses

Por
Manifestación para protestar por la incompetencia del gobierno luso ante la oleada de incendios el 21 de octubre de 2017 en Lisboa (Portugal).
Manifestación para protestar por la incompetencia del gobierno luso ante la oleada de incendios el 21 de octubre de 2017 en Lisboa (Portugal).

El Gobierno portugués ha aprobado un paquete global de ayudas a las víctimas y a la reconstrucción de las zonas afectadas por los devastadores incendios en el país, para frenar las protestas como las que este sábado han sacado a la calle a miles de portugueses para exigir soluciones.

Son varios cientos de millones de euros los que el Ejecutivo luso destinará a rehabilitar viviendas y empresas, fomentar el empleo en las zonas quemadas, promover planes de inversión y, en primer lugar, indemnizar a las familias de las más de cien víctimas mortales de los fuegos de este año.

El Gobierno del socialista António Costa las ha aprobado en reunión extraordinaria del Consejo de ministros, mientras miles de ciudadanos se han congregado en Lisboa, y muchas otras personas en las principales ciudades del país, en solidaridad con las víctimas y para exigir medidas urgentes que eviten nuevas tragedias.

"Está fallando todo, está fallando la prevención, el combate y los sucesivos gobiernos que han pasado por nuestro país, creo que todos fallamos", se ha lamentado en declaraciones a Efe Ana María, una de las participantes en la concentración de la capital lusa.

Otra imagen de la manifestación en la capital de Portugal. Pedro Nunes

Desde la ciudad de Guarda, en el centro de Portugal, Hugo Moreira ha explicado que "estas manifestaciones son un homenaje a las personas que perdieron sus vidas, a las personas que perdieron sus casas, sus empresas y a la gente que perdió su trabajo".

En Coimbra se han podido leer pancartas con mensajes que pedían el "fin al negocio del fuego", mientras que en Oporto se ha solicitado una mayor defensa del patrimonio forestal, a la vez que se ha expresado el apoyo y agradecimiento a los bomberos.

Han sido en su mayoría marchas silenciosas para mostrar la doble indignación por las víctimas mortales y por la falta de soluciones para evitar que haya más.

En la protesta de la ciudad de Bragança (al norte del país y cerca de la frontera con España), grupos de voluntarios han repartido bellotas entre los participantes para pedir a los gobernantes que se planten más robles y menos eucaliptos.

También ha sido llamativa la cadena humana que se ha formado en una de las zonas más afectadas por los fuegos, en Marinha Grande (costa central atlántica).

108 muertos en un plazo de cuatro meses

En todas las manifestaciones, convocadas en redes sociales bajo el lema "Portugal contra los incendios", se han guardado minutos de silencio en memoria de las 44 víctimas mortales de los fuegos declarados el pasado domingo, así como de las otras 64 con las que se saldó el incendio del pasado junio en Pedrógao Grande.

En total han sido 108 muertos en un plazo de cuatro meses, algo que exige una respuesta global y urgente a todos los niveles, ha incididido este sábado el presidente portugués, el conservador Marcelo Rebelo de Sousa, desde uno de los pueblos afectados por las llamas.

El jefe del Estado, que está recorriendo todas las zonas dañadas por el fuego, ha calificado de positivo el hecho de que el Ejecutivo haya decidido acelerar el pago de las indemnizaciones a las familias de las víctimas.

Pancarta en la que puede leerse ¿Quién se lucra con los incendios? PATRICIA DE MELO MOREIRA

Lo hará a través de un mecanismo extrajudicial y de adhesión voluntaria que prevé la creación de una comisión encargada de fijar los criterios de esas indemnizaciones en un plazo máximo de 30 días.

A partir ahí, el Gobierno espera concretar el pago "lo antes posible", ha explicado a la prensa la ministra de Justicia, Francisca Van Dunem.

Esta ha sido la primera de una larga lista de medidas de apoyo a los afectados y de mejora de la prevención y combate a los incendios aprobadas este sábado en una reunión del Consejo de ministros en la que participa ya Eduardo Cabrita como nuevo ministro de Administración Interna (Interior).

Cabrita, que hasta ahora era ministro adjunto del jefe del Ejecutivo, el socialista António Costa, asumió el cargo esta misma mañana, en sustitución de Constança Urbano de Sousa, quien dimitió por las críticas a su gestión de los graves incendios en el país.