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El nuevo PSOE de Pedro Sánchez en diez claves

  • El PSOE cierra una etapa negra en el 39º Congreso Federal
  • Sin hipotecas, ni 'barones', ni familias, Sánchez se siente libre
  • Quiere ser la referencia de la izquierda para llegar a La Moncloa
  • La militancia será la espina dorsal del nuevo modelo de partido
  • El nuevo PSOE defiende la "plurinacionalidad· de España

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Sánchez y su núcleo duro en el Congreso Federal.
Sánchez y su núcleo duro en el Congreso Federal.

El PSOE ha puesto fin este domingo a su 39º Congreso Federal en el que Pedro Sánchez arranca su segunda Secretaría General consecutiva con una nueva dirección sin 'barones' y sin críticos y con un nuevo rumbo con dos claros destinos: la izquierda y La Moncloa.

Estas son las diez claves del nuevo PSOE:

Líder fuerte, sin hipotecas ni 'barones'

Sánchez coge las riendas del partido sin hipotecas y con una Ejecutiva absolutamente afín formada por todas aquellas personas integrantes del núcleo duro con el que ganó las primarias. Diputados díscolos que mantuvieron el 'no es no', representantes de municipios y comunidades que respaldaron su candidatura, exministras de José Luis Rodríguez Zapatero con las que tiene sintonía y veteranos afines al partido y a sus ideas le acompañarán en el viaje que arranca este domingo.

Ni familias, ni cuotas ni 'barones' que impongan ningún criterio ni imposición al renacido líder, que ya no debe favores, como sí debía cuando fue elegido en 2014. Meridianamente claro lo ha dicho, en una de las declaraciones más demoledoras de este congreso, el nuevo portavoz del PSOE, Óscar Puente: "El tiempo de los barones pasa a la historia a partir de este fin de semana'.

Por encima de todos los elegidos por Sánchez dos nombres propios: Adriana Lastra, nueva vicesecretaria general, y José Luis Ábalos, secretario de Organización, las nuevas manos derecha e izquierda del líder.

PSOE, partido "referente de la izquierda rumbo a La Moncloa"

'Somos la izquierda' ha sido el lema del congreso y se puede decir que será el eslogan a seguir en el nuevo PSOE. Ya lo dijo la nueva número dos cuando visitó las instalaciones del cónclave el pasado viernes: "Muy bien, todo muy rojo que somos de izquierdas".

Lo han repetido hasta la saciedad en este cónclave y es el mensaje que ha hecho ganador a Sánchez, puño en alto. El nuevo PSOE deber ser de nuevo el referente de la izquierda en España para ganarse la confianza de los ciudadanos progresistas y volver a ser "la izquierda de gobierno". Ese es el mantra.

"Somos la izquierda de gobierno y estamos aquí para representar a quienes decían que nadie les representaba", ha dicho Sánchez en el cierre del congreso, citando al 15M y en claro guiño a los votantes de Podemos.

"Rumbo a La Moncloa" también se ha convertido en uno de los emblemas y para llegar a ese fin último Sánchez aboga por una izquierda "real", "creíble", "responsable", "dialogante" pero siempre "una izquierda que busca la utopía".

Es el mensaje que ha ofrecido este domingo Sánchez en el cierre del congreso con un gran acto al que han asistido más de 8500 militantes. Nunca antes el principal cónclave del PSOE había acabado con un macromitin con la militancia, que ha recibido a Sánchez como si fuera una estrella del rock.

"Unidad, unidad, unidad"

El socialismo coincide, tanto sanchistas como susanistas, en que para volver a recuperar la fortaleza el partido debe estar unido. Han sido numerosas las llamadas a la unidad por parte de todos en este congreso.

La propia Díaz ha reinvidicado esa unidad poniéndose a disposición del secretario general para ayudar al PSOE a volver al Gobierno de España.

Desde que Sánchez ganara las primarias el 21 de mayo no ha habido voces discrepantes con el nuevo líder y son muchos los delegados del congreso que vaticinan una temporada de paz interna. Que la paz sea verdadera o sólo una guera fría lo dirá el tiempo.

Susana Díaz sale del congreso con cara de derrota

La andaluza, llamada por todo el aparato a ser la número uno del PSOE, quedó relegada este sábado a la fila 12 del Plenario, desde donde escuchó cómo los delegados recibieron a Sánchez al grito de 'presidente, presidente'. Entró muy sonriente y salió compungida.

Desde la noche de su derrota frente a Sánchez, en la que no fue capaz de pronunciar el nombre de su secretario general, Díaz se ha replegado en su feudo andaluz y todos los mensajes han ido en la línea de reconocer que Sánchez ganó claramente, por lo que le da vía libre para formar una dirección con quien el considere. "Lo que decida Pedro me parecerá bien", ha señalado en varias ocasiones.

Tras reunirse con Sánchez este sábado durante escasos diez minutos, en los que ni él la ofreció nada ni ella le pidió nada a él, salió con rostro desencajado. Este domingo no acompañará a Sánchez en el acto principal del congreso federal.

Patxi López, el rival que vuelve a ser del núcleo del lider

De integración mucho más sencilla, Patxi López pasará de nuevo a formar parte del núcleo duro de Sánchez, tras haber disputado con él la Secretaría General.

El exlehendakari llevará una Secretaría clave, la de Política Federal, encargada de defender el modelo federal de Estado por el que apuesta el PSOE. Desde el entorno de Sánchez dejan claro que su fichaje no obedece a cuotas sino a su gran capacidad de gestión.

Especialmente cómodo se ha visto a López durante este congreso donde ha sido muy bien recibido por los delegados. Se ha llevado una de las mayores ovaciones del cierre del cónclave.

Líderes históricos que quedan en el siglo pasado

Sánchez los desprecio, de alguna manera, durante los largos meses desde el dramático Comité Federal que supuso su caída hasta su triunfo en las primarias. Para él representan el PSOE del siglo XX frente al PSOE del siglo XXI, que lleva su imagen, en su opinión.

Las caras largas indisimuladas que el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y los ex secretarios generales Alfredo Pérez Rubalcaba y Joaquín Almunia mostraron este sábado durante la inauguración del congreso, junto el mensaje escueto y sin entusiamo que dejó grabado en vídeo el histórico Felipe González, contrastan con las caras de felicidad que mostraron estos referentes históricos en el acto de apoyo a la candidatura de Díaz en las primarias.

Al caer ella, han caído todos. Ninguno, ni la andaluza ni los expresidentes, ha estado este domingo con Sánchez en su puesta de largo como secretario general.

La militancia, en el centro del nuevo partido

Las bases socialistas son las que han llevado en volandas a Sánchez hasta Ferraz y este ya ha dicho que solo se debe "a la palabra dada a la militancia", que define como "espina dorsal" del PSOE.

Por ello, arranca su etapa con los afiliados socialistas que le han hecho conseguir lo imposible. Y a ellos les da el poder: votarán pactos y alianzas electorales, elegirán a los candidatos- en este punto también los simpatizantes- y serán los que revoquen a un secretario general. Ellos mandan en el nuevo PSOE, dice el nuevo líder.

España "plurinacional"

El proyecto político del PSOE aprobado por el 39 Congreso Federal del PSOE apuesta por impulsar una reforma "federal" de la Constitución para "perfeccionar el reconocimiento del carácter plurinacional del Estado", tal y como quería Sánchez, que matizó en su día dejando claro que no se refería a la existencia de nacionalidades políticas sino a "naciones culturales".

Esta apuesta es "perfectamente compatible con la integridad del Estado español y con la soberanía de todo el pueblo de España", reza el texto.

Este será, sin duda alguna, uno de los acuerdos que genere más debate tanto dentro como fuera del partido, en plena deriva independentista de Cataluña.

¿Fin a una etapa de convulsión interna?

Con este congreso se cierra una etapa larga de nueve meses bajo el control de una gestora y se inicia un tiempo nuevo en la dirección federal donde Sánchez tiene, en principio, manos libres para hacer y deshacer.

Pueden empezar, eso sí, los problemas en las federaciones donde se celebrarán en breve los congresos regionales y los 'sanchistas' podrían dar la batalla para acabar también con el poder autonómico de las 'baronías'.

El difícil equilibrio con Podemos

En esa lucha que inicia Sánchez por recuperar el espacio de la izquierda, Podemos se convierte en un actor clave. Sánchez tendrá que combinar la estrategia de atacar a la formación de Pablo Iglesias para robarle votos con la de tender la mano para construir "mayorías parlamentarias alternativas". Y en esa mayoría también incluye a Ciudadanos a pesar de que las dos nuevas formaciones se vetan mutuamente.

Ya intentó esa fórmula y no le salió bien pero este domingo ha vuelto a insistir en llamar a ambas formaciones para acabar con la "etapa negra" del PP.

El PSOE quiere desterrar para siempre los miedos al 'sorpasso' pero este PSOE es consciente de que sin Podemos es muy difícil que los socialistas vuelvan a gobernar en España.

Arranca un nuevo tiempo con Sánchez que ya es dueño de su propio destino.