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Salida escalonada con escasos atascos en la segunda fase de la Semana Santa

  • Desde el pasado viernes, han muerto diez personas en diez accidentes
  • Para esta Semana Santa la DGT ha previsto 14,8 millones de desplazamientos
  • El operativo incidirá en un mayor control de las carreteras secundarias del país

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Vista de la A-2, en sentido Barcelona, durante la primera fase de la operación salida de Semana Santa
Vista de la A-2, en sentido Barcelona, durante la primera fase de la operación salida de Semana Santa

Una salida escalonada ha convertido esta Semana Santa en una de las más tranquilas en las carreteras, que apenas han registrado retenciones pese a que tradicionalmente la tarde del Miércoles Santo y la mañana del Jueves Santo suelen concentrar el mayor número de desplazamientos.

Desde el inicio de la operación de tráfico de Semana Santa, a las tres de la tarde del Viernes de Dolores, día 7, y hasta las ocho de la tarde de esta jornada se han registrado diez accidentes mortales con diez fallecidos.

El buen tiempo en toda España ha animado a los conductores, que, sin embargo, se han repartido a lo largo de la primera mitad de las vacaciones para dirigirse a destinos como las playas o las localidades donde se celebran las tradicionales procesiones de Semana Santa.

Menos problemas en Madrid que en Barcelona

Pero esta vez, la procesión de coches ha sido menos numerosa que otras veces y, según los datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), en las salidas de Madrid los atascos apenas se prolongaban dos o tres kilómetros de autovías como la A-3, a la altura de Rivas-Vaciamadrid (Madrid) en sentido Valencia, o la A-4 en Getafe (Madrid) en dirección Córdoba.

La A-42 ha soportado algo de intensidad circulatoria en Parla (Madrid) en sentido Toledo, una provincia que, a su vez, contaba con las mayores dificultades en la A-5 a su paso por las localidades de Santa Cruz de Retamar y Maqueda.

Quizá hayan sido las carreteras de Barcelona las más afectadas por la circulación, como la B-10 en la Ciudad Condal, la B-32 en Esplugues de Llobregat, la A-2 en Sant Feliu de Llobregat y en Castellbisbal, y las de Zaragoza, con atascos en la N-II en La Puebla de Alfindén y la A-2 en la capital.

Ya en la provincia de Albacete, las carreteras más conflictivas han sido la A-31 a la altura de La Roda y la A-30 en la capital; y en Ciudad Real, la A-4 en Valdepeñas.

Valencia ha tenido circulación intensa en algunas partes de su red viaria, como la A-3 en la propia capital de la provincia y en Xirivella o la V-31 en Silla.

Casi nueve millones de desplazamientos hasta el lunes

Tráfico espera alrededor de 8,8 millones de desplazamientos desde este miércoles hasta el lunes 17 de abril, cuando finaliza la operación especial de Semana Santa.

Según la DGT, el movimiento de vehículos de esta fase forma parte de los 14,8 millones de viajes que se realizarán en todo este periodo vacacional, el mayor "éxodo" del año que comenzó a las 15.00 horas del pasado Viernes de Dolores.

Con el deseo de mantener la tendencia a la baja de la siniestralidad con la que ha comenzado el año, la DGT pone en marcha un operativo que incidirá en el mayor control en las carreteras secundarias, sobre todo de la velocidad, el consumo de alcohol y drogas y el uso del cinturón o el casco.

El dispositivo se alargará hasta la medianoche del lunes 17 de abril con la operación retorno, que comprenderá desde el sábado por la tarde y se prolongará durante todo el domingo y el lunes, ya que es festivo en Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana, Navarra, País Vasco y La Rioja.

Cámaras para vigilar el uso del cinturón

Un operativo que contará con los servicios de todos los agentes disponibles de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, así como con más de 13.000 empleados de las empresas de conservación y más de 800 funcionarios y personal técnico especializado.

Desde este martes, 225 cámaras instaladas en la red viaria, el 60% en las carreteras secundarias, vigila el uso del cinturón de seguridad, aunque en los dos primeros meses de funcionamiento no se multará, si bien se enviará una carta a los conductores que sean detectados para concienciarles de la necesidad de su utilización.

Pasado este periodo de prueba, Tráfico multará a los infractores con 200 euros y la detracción de tres puntos del carné.