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El PP rechaza por solo 25 votos la enmienda contra la acumulación de cargos de Cospedal

  • Se acepta promover la separación "gradual" de cargos de partido y gobierno
  • Rajoy decidirá el sábado si Cospedal sigue siendo secretaria general
  • La limitación de mandatos no llega a debatirse al decaer la única enmienda

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María Dolores de Cospedal, en un momento del congreso nacional del partido que se celebra en Madrid
María Dolores de Cospedal, en un momento del congreso nacional del partido que se celebra en Madrid.

La acumulación de cargos y la limitación de mandatos, dos de las cuestiones más que más expectativas habían suscitado en el debate sobre la organización política y los estatutos del PP, no han llegado a pasar el corte y allanan respectivamente el camino de la continuidad de María Dolores de Cospedal como número dos del partido y el horizonte de la sucesión de Mariano Rajoy.

El plenario del congreso nacional del PP ha tumbado, por apenas 25 votos de diferencia, la enmienda de un compromisario de Cuenca contra la acumulación de cargos que hablaba explícitamente del caso de la secretaria general. Dado que, de este modo, los estatutos del partido no lo impedirán, que Cospedal continúe como número dos de Rajoy en el PP depende ya exclusivamente de la decisión de este, que dará a conocer el sábado.

Según fuentes "populares", el plenario al que estaban convocados los más de 3.000 compromisarios del PP, en el que se debatía la ponencia de estatutos, ha rechazado la enmienda de Francisco Risueño, compromisario del municipio conquense de San Clemente, por 328 votos en contra, frente a 303 a favor y ocho abstenciones.

La enmienda de Francisco Risueño era la única que hablaba de forma explícita del caso de Cospedal, que además de secretaria general es presidenta regional del partido, ministra de Defensa y diputada, aunque había otras muchas sobre el régimen de incompatibilidades.

Separación "gradual" de los cargos del partido y del Gbbierno

La mayoría de estas enmiendas -eran varias decenas- decayeron antes de llegar al congreso, aunque a mediados de semana, según fuentes 'populares' todavía quedaban unas diez.

También, el PP ha aceptado la enmienda del dirigente madrileño Íñigo Henríquez de Luna que defendía promover la separación y limitación "gradual" de la acumulación de cargos del partido y del Gobierno.

Tras una negociación estos días con el vicesecretario de Organización, Fernando Martínez-Maillo, el artículo 3 de la ponencia Política y de Estatutos recogerá ahora textualmente: "Defendemos el diálogo y la moderación como ejes de nuestros Gobiernos. Por ello promoveremos una gradual separación y limitación en la acumulación de cargos institucionales de gobierno y orgánicos del partido".

Henríquez de Luna se ha manifestado "satisfecho" con el acuerdo. A su entender, el PP tiene que "aprender de los errores del pasado", ya que, "muchos de los casos de corrupción" que están ahora en los tribunales vienen "precisamente de confundir" estos dos planos que tienen que ser complementarios pero que "no pueden identificarse". "En este sentido, creo que hemos dado un paso importante para cambiar el modelo de partido", ha concluido.

La limitación de mandatos no llega a discutirse

Por otra parte, la limitación de mandatos no ha llegado a debatirse en el congreso nacional del PP, porque la única enmienda que quedada reclamándola se ha retirado antes de iniciarse el debate de la ponencia de estatutos.

Fuentes 'populares' han confirmado a Efe que la única enmienda que quedaba -firmada por Eduardo Dolón, secretario general del partido en Alicante- se había retirado el jueves por la noche, y desde el PP valenciano han confirmado que dicha enmienda era una de las acordadas por las tres direcciones provinciales del partido en esa comunidad.

En los últimos días numerosos dirigentes del PP habían subrayado públicamente la oposición a recoger la limitación de mandatos en los estatutos del partido, a pesar de que Ciudadanos insiste en que es uno de las condiciones que puso al PP en su acuerdo para la investidura de Mariano Rajoy.

Desde el PP se ha argumentado estos días -el propio Mariano Rajoy lo ha dicho en alguna ocasión- que la limitación de mandatos es más propia de regímenes democráticos presidencialistas y no parlamentarios como el español.

Ajustes en el sistema de doble vuelta para elegir al líder

Además, se han introducido introducir algunas modificaciones en su sistema de doble vuelta para la elección del líder del partido con el objetivo de no revertir la decisión de los militantes en la primera votación. Martínez-Maillo ha asegurado que se trata de que la opinión de los afiliados en primera votación, "cuando es clara y rotunda", "no pueda ser cambiada por los compromisarios y que la unión de uno o varios candidatos no cambie la voluntad de los afiliados".

El primero de los cambios se ha aplicado en los criterios con los un aspirante a presidir el partido es proclamado candidato único tras la primera vuelta, en la que votan de maner directa todos los afiliados.

En primera vuelta, según la idea inicial, el candidato tenía que lograr mayoría absoluta del conjunto de votos, superar en al menos 15 puntos al siguiente y obtener mayoría absoluta en al menos 30 de las 60 circunscripciones en que divide el PP su organización territorial.

Ahora podrá ser proclamado si se cumplen del mismo modo los dos requisitos y si en el tercero logra ser el más votado en treinta circunscripciones sin necesidad de que sea por mayoría absoluta.

También se ha aprobado que la segunda vuelta sea "a la francesa", de forma que solo dos candidatos, y no más, podrán pasar a la segunda vuelta si ninguno de los aspirantes logra ser proclamado candidato único en la primera. En la propuesta inicial, pasaban a esa segunda votación todos los candidatos con más de un 20% de los votos.

Militantes no, afiliados

Como hecho anecdótico, el PP ha decidido eliminar en sus estatutos -y, en consecuencia, en su discurso- cualquier mención al término "militante" con el objetivo de diferenciarse de los partidos de izquierda.

Desde ahora, las normas que regulan el normal funcionamiento del partido recogerán los conceptos "simpatizante" y "afiliado" para referirse a su masa social, pero no el de militante.