Enlaces accesibilidad

Descubren el púlsar más lento conocido hasta el momento

  • Es un estudio realizado por investigadores del CSIC
  • Se trata de una estrella de neutrones con un campo magnético muy intenso
  • Se ha confirmado como magnetar gracias a su intenso campo magnético

Por
El púlsar más lento detectado hasta el momento ha sido identificado en un estudio realizado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
El púlsar más lento detectado hasta el momento ha sido identificado en un estudio realizado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

El púlsar más lento detectado hasta el momento ha sido identificado en un estudio realizado por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

Se trata de un magnetar atrapado en los remanentes de una supernova -explosión espacial- brillante, denominada RCW103, que explotó hace unos 2.000 años y se encuentra a unos 9.000 años luz de la Tierra.

El trabajo, que ha sido publicado en la revista The Astrophisical Journal Letters, muestra que se ha confirmado este púlsar como magnetar gracias a la observación de una erupción en banda X muy potente, causada por la inestabilidad de sus enormes campos magnéticos.

Estrellas de neutrones con campos magnéticos

Los magnetares son estrellas de neutrones con campos magnéticos extremadamente fuertes, alrededor de 1.000 veces más intensos que los radio púlsares, los cuales tienen una intensidad mil billones de veces mayor que la del Sol.

Estas estrellas nacen de las explosiones de supernovas y se caracterizan por rotar a gran velocidad y tener una masa un poco mayor que la del Sol, aunque concentrada en un radio de unos 10 kilómetros aproximadamente.

Además, su edad se determina a partir de la velocidad de rotación, ya que a medida que pasa el tiempo estas rotan más lentamente.

Se han reaizado observaciones mensuales

Según explican los científicos, durante el estudio estos datos se han podido demostrar gracias a que durante 10 años se han ido realizado observaciones mensuales por el telescopio espacial Swift, y ya desde 2016, por los telescopios Chandra y NuSTAR también.

“La peculiar periodicidad en la emisión de rayos X de este objeto, estimado en 6,4 horas, se debe a su periodo de rotación, que es excepcionalmente lento”, explica Nanda Rea, investigadora del CSIC en el Instituto de Ciencias del Espacio, de Barcelona.

En este sentido, Swift, Chandra y NuSTAR, los telescopios espaciales empleados, han podido caracterizar el espectro de emisión X de esta fuente antes y después de la erupción.

“Este descubrimiento desvela también importante información acerca de los mecanismos de ralentización que han podido afectar a esta estrella de neutrones desde su nacimiento para que ahora, con sólo 2.000 años de edad, presente una rotación tan lenta”, explica Rea.

Además concluye diciendo que, “posiblemente se deba a la presencia de material acumulado alrededor del púlsar tras la explosión de la supernova. Lo que aún no tenemos claro es si ese material continúa allí en forma de disco o, por el contrario, desapareció poco después de la explosión”.