Enlaces accesibilidad

El Ministerio de Economía multa con 12 millones a Deloitte por su actuación en la salida a Bolsa de Bankia

  • Por vulnerar su deber de independencia al supervisar las cuentas de la entidad

Por
Logo de Bankia en una oficina próxima a la sede del banco en Madrid
Logo de Bankia en una oficina próxima a la sede del banco en Madrid.

El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, ha confirmado este miércoles la multa de 12 millones de euros impuesta a la empresa auditora Deloitte por su actuación en la salida a Bolsa de Bankia.

En una visita a Ávila, De Guindos ha explicado que el equipo del Ministerio encargado del recurso presentado por Deloitte ha resuelto en el mismo sentido que el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) e impone la multa de 12 millones a la auditora por vulnerar su deber de independencia a la hora de supervisar las cuentas de una entidad, en este caso, de Bankia.

El ministro en funciones ha explicado que esta resolución es un "procedimiento habitual" ante la propuesta de sanción que realiza el ICAC. El 20 de octubre de 2014, el ICAC aprobó el acta de la reunión de principios de ese verano en la que impuso una sanción a Deloitte de 12 millones de euros por sus trabajos para Bankia en la época de Rodrigo Rato.

Todo este proceso se inició en junio de 2013, mes en el que el ICAC abrió un expediente administrativo a Deloitte y a su socio Francisco Celma. Según el organismo depediente del Ministerio de Economía, la auditora tenía clasificada a Bankia como una "empresa con pérdidas o en punto muerto o con bajo nivel de rentabilidad" mientras trabajaba en las cuentas semestrales previas a su salida a Bolsa, números que Deloitte avaló sin haber advertido de este extremo.

El pasado 20 de junio, Deloitte y uno de sus socios, Francisco Celma, explicaron que la multa de 12 millones impuesta por falta de independencia se debió a la inexperiencia en el ámbito de la auditoría de los propios representantes de ese organismo.

Celma argumentó entonces que la sanción era "un contrasentido" ya que tanto la firma como él son expedientados por un organismo oficial, el ICAC, por haber prestado unos servicios profesionales solicitados por otro organismo del Estado, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).