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'Caso Nóos'

El presidente de Ausbanc propuso a La Caixa la "jugada maestra" para desimputar a la infanta

  • Fue en una conversación telefónica antes de que la infanta declarara en el juicio
  • Luis Pineda expone al director general de la Fundación La Caixa varias opciones
  • En otra conversación, plantea "humillar un poco" a la letrada de Manos Limpias

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Imagen de archivo de la infanta Cristina durante su declaración como acusada en el juicio de Nóos
Imagen de archivo de la infanta Cristina durante su declaración como acusada en el juicio de Nóos

El presidente de Ausbanc, Luis Pineda, propuso al director general de la Fundación La Caixa, Jaume Giró, la "jugada maestra" para desimputar a la infanta Cristina después de declarase en el jucio por Nóos, en una conversación en la que critican al abogado de la infanta por estropear negociaciones al respecto.

En una llamada telefónica pinchada del 29 de febrero y contenida en el sumario del caso Ausbanc-Manos Limpias, al que ha tenido acceso Efe, Pineda y Giró tratan la posibilidad de que Manos Limpias levante la imputación a la infanta.

Luis Pineda. - Aquí hay dos temas, o reducir en su día, que es cuando se califique la petición, ¿no?, reducirla o quitarla, o intentar que se haga la jugada maestra, después de... que haya hablado, decir: no vemos causa, adiós buenas.

Jaume Giró.- Claro, nos allanamos.

Pineda.- Bueno, técnicamente es otra cosa.

Giró.- ¿No se llama así? técnicamente.

Pineda.- No, no, desimputamos.

Giró.- Escucha, a efectos prácticos es que retira los cargos.

Pineda.- Es lo mismo, es lo mismo exactamente, a efectos prácticos es que, como solamente hay una acusación, la tienen que quitar y punto.

Barajaron reducir la pena o retirar directamente la acusación

Así hablaron de la posibilidad de, o bien reducir la pena pedida por Manos Limpias a la infanta por cooperar en delitos fiscales de su marido, Iñaki Urdangarin, o directamente retirar la acusación y que quedara desimputada, todo ello después de que la hermana del rey declarase en el juicio.

Antes de esta conversación, Giró había accedido a tratar el asunto con Pineda, pero le había preguntado si, dado que ya estaba sentada en el banquillo, aún cabía la posibilidad de hacer algo.

Pineda.- El tema de Palma, eso va a terminar pasando por mí.

Giró. - Ya.

Pineda.- Si queréis, si tú quieres lo vamos hablando.

Giró.- Sí, pero claro, ¿cuándo?

Pineda.- Te lo digo, no, te lo digo por que lo sepas.

Giró.- No, porque es que yo esto, no, pero escucha, yo quería este tema intentar arreglarlo antes. Claro, ahora lleva ya no sé cuántos días sentada en el banquillo, ahora ya me dirás cómo lo arreglo, ahora el daño ya está hecho, ¿tú me entiendes?

Pineda.- No hombre, pero lo bueno sería... por reducir...

Giró.- Hombre Luis, no, es que a mí me gusta ser serio, joder, es que yo ya esperaba y trabajé y me reuní para un tema, pero como, no ahora.

Acto seguido, Bernad se excusa de que en su día no avanzó el tema porque Giró le había dicho que "hablase con alguien que se fue a Hong Kong", pero finalmente no pudo ponerse en contacto con esa persona.

Más adelante, critican unas negociaciones que llevó por su parte, según dicen, el abogado de la infanta, Miquel Roca.

Pineda.- "Es que el despacho de Roca les hizo una propuesta y se dijo que (ininteligible) sobre la marcha, y Roca encima está con el Sabadell.

Giró.- Si no es por ese despacho ya lo hubiéramos arreglado todo, perdona que te diga.

Pineda critica que Roca intentara negociar llamando a "el de la Fundación Francisco", pero que este reaccionó "al revés: se echa para atrás y además se pone de uñas".

Antes de colgar, Pineda le traslada su preocupación de que al rey Felipe VI, al que llama "el sexto", no le pueda gustar que se desimpute a la infanta, a lo que Giró contesta que el "no la quiere cerca", pero la prefiere absuelta.

Pineda.- Yo tengo la sensación, a ver si coincidimos o no, a ver si vamos a arreglar una y hacemos algo peor, que el gran jefe jefe, el recién llegado, el sexto, no está muy a gusto con la señorita.

Giró.- No está a gusto pero prefiere que la liberen inocente que no que la... lo que no la quiere es cerca.

Pineda.- Eso también era un castigo para que claudiques, ¿no? renuncia.

Giró.- Lo que no la quiere es cerca de él, ¿no me enciendes?

Pineda.- Ya, pero a ver si vamos a trabajar con la de... con el tema y resulta que el otro va a decir... encima se cabrea.

Giró.- Eh... si quieres se puede intentar comprobar explícitamente, pero...

Pineda.- Claro, no vaya a ser que lo hacemos perfecto y resulta que nos hemos equivocado.

Giró.- Yo creo que no, que no nos equivocaríamos.

(...)

Giró. - Él lo que quiere es que no le... hacer un cordón sanitario para que no le contamine, ¿vale?

Pineda.- Claro.

Giró.- Pero entre tener una hermana de rey e hija de rey condenada o absuelta, ¿tú que crees que prefieren?

Pineda planteó "humillar un poco" a la abogada de Manos Limpias

Las conversaciones telefónicas intervenidas al presidente de Ausbanc, Luis Pineda, revelan su desprecio a la abogada de Manos Limpias en el caso Nóos, Virginia López Negrete, por su excesivo protagonismo, hasta el punto que afirma: "Hay que anularla, además de vez en cuando humillarla un poco".

El sumario de sobre las supuestas extorsiones de Ausbanc y Manos Limpias a bancos y empresas recoge horas de grabaciones de las conversaciones de Pineda, varias de ellas relativas al caso Nóos, en el que intentaba dirigir la actuación de Manos Limpias mientras negociaba la posible retirada de la acusación.

Entre esas conversaciones hay una del 7 de enero, pocos días antes de que se celebrara la vista de cuestiones previas del juicio de Nóos, en la que el presidente de Ausbanc pide a su colaborador Francisco Javier Castro-Villacañas que vaya a Palma de Mallorca junto al secretario general de Manos Limpias, Miguel Bernad. El problema, según su interlocutor, es que Bernad "no hace ni puñetero caso a nadie".

Por ello, Pineda le pide que esté con él, "sobre todo para que no deje hueco a esta hija puta", en referencia a la abogada, pues estaba convencido de que quien tenía que hablar era el secretario general de Manos Limpias y no ella.

"No se la puede dejar ese minuto de gloria coño, no se la puede dejar, hay que anularla, además de vez en cuando hasta humillarla un poco, haga lo que se la mande, porque cada vez que hace algo que no se la manda me mete en un lío, porque parece que es torpe, corre esa voz", subraya Luis Pineda.

Por ello, insiste a Castro-Villacañas en que vaya y ejerza de director de Comunicación, porque "Miguel hace lo que quiere salvo que alguien le ayude".

El presidente de Ausbanc se muestra obsesionado con controlar la comunicación, con que López Negrete no hable y con que tenga claro que va a hacer lo que se le mande. "Ella que se coma la sesión", dice.

"Dile a Miguel que lo que lo tiene que dejar muy claro, porque esta tía se ha aprovechado de él, de mí y de todo dios", añade.

Dos días después vuelven a hablar y Castro-Villacañas le pasa el teléfono a Bernad, si bien avisa para que hablen "por teléfono lo mínimo".