Enlaces accesibilidad

La energética alemana E.ON perdió 7.000 millones en 2015, más del doble que el año anterior

  • Lo atribuye a 8.800 millones perdidos por la depreciación de activos de generación

Por
Un semáforo en rojo en el exterior de la sede central de E.ON en la ciudad alemana de Essen

La compañía alemana de suministro energético E.ON perdió 6.999 millones de euros en 2015, con lo que más que duplicó las pérdidas de 3.160 millones de euros del año anterior. Este mal resultado se produce después de que haya asumido un impacto negativo de 8.800 millones, principalmente, por el depreciación de sus activos de generación.

"Se registraron cargos de 8.800 millones de euros por el deterioro [del valor] de activos de generación en el otoño de 2015", ha informado este miércoles la empresa germana.

Por su parte, el resultado subyacente de la compañía eléctrica alemana alcanzó al cierre del pasado ejercicio un total de 1.648 millones de euros, en línea con los 1.646 millones de 2014.

El resultado bruto de explotación (Ebitda) de E.ON en 2015 registró un retroceso del 9,8%, hasta quedar en 7.557 millones de euros, mientras que sus ventas sumaron 116.218 millones de euros, un 2,7% más que un año antes.

Por otro lado, E.ON ha indicado que sus inversiones alcanzaron 4.174 millones de euros, un 10% menos, mientras que la deuda económica de la empresa se redujo en 5.700 millones hasta quedar en 27.700 millones de euros.

"Nuestras cifras reflejan la transformación de largo alcance de nuestra industria y que no disminuye este año", ha declarado el consejero delegado de E.ON, Johannes Teyssen.

En su próxima junta general de accionistas, el consejo de E.ON propondrá el reparto de un dividendo correspondiente al ejercicio 2015 de 0,50 euros por acción, que supondría repartir el 60% del beneficio neto subyacente.

Un 2016 marcado por los bajos precios de la energía

En los primeros meses de 2016, la compañía alemana advierte de que "se han observado nuevos mínimos en los precios de la energía, mayores descensos en los precios del gas y un rublo persistentemente débil". Con esos mimbres, E.ON espera que una bajada de su Ebitda este año, hasta situarse entre 6.000 y 6.500 millones de euros, y prevé que su beneficio subyacente se sitúe entre 1.200 y 1.600 millones de euros.

No obstante, la multinacional indicó sus perspectivas para 2016 podrían verse revisadas "significativamente a la baja" para tener en cuenta la separación de Uniper, la empresa donde agrupará su negocio de generación convencional.

En este sentido, el consejero delegado de E.ON ha admitido que el entorno económico e industrial "se ha deteriorado sustancialmente" desde que la compañía anunció su nueva estrategia en 2014, por lo que las premisas contempladas por la compañía sobre el desarrollo futuro de Uniper y E.On estarán sujetas a una evaluación crítica.

"El difícil entorno del mercado provocará, particularmente, que el flujo de caja libre sea inferior a lo asumido anteriormente y las inversiones y dividendos tendrán que reflejarlo", ha apuntado la empresa.