Enlaces accesibilidad

Caruana: mantener los tipos bajos "durante mucho tiempo" provocará "nuevas causas de inestabilidad financiera"

  • Así lo ha asegurado el director general del Banco de Pagos Internacionales
  • Afirma que "la economía global tiene ahora más deuda, está más sensible"

Por
El director general del Banco de Pagos Internacionales (BPI), Jaime Caruana
El director general del Banco de Pagos Internacionales (BPI), Jaime Caruana, en una imagen de archivo.

El director general del Banco de Pagos Internacionales (BPI), Jaime Caruana, ha alertado del hecho de que si los tipos de interés bajos (e incluso negativos) actuales "se mantienen durante mucho tiempo" provocarán "nuevas causas de inestabilidad financiera" y podrían aumentar de forma excesiva la deuda pública y privada. En este sentido ha apuntado que la economía global tiene ahora "más deuda y está más sensible", hechos que "aumentan la complejidad" de la situación financiera mundial.

En una conferencia ofrecida en la escuela de negocios IESE en Barcelona, Caruana ha destacado que los tipos bajos forman parte de la situación de desequilibrio, no del nuevo equilibrio: "No es una situación normal y no es necesaria".

"Los tipos de interés negativo es una experiencia sobre la que no sabemos demasiado y seguimos aprendiendo y monitorizando que es lo que está sucediendo", ha asegurado Caruana, para quien "es bueno que en algún momento vayamos hacia un proceso de normalización", como ha ocurrido en Estados Unidos. Sin embargo ha destacado que es competencia de cada banco central la decisión de aprobar subidas, a partir del análisis de la economía de su región.

En declaraciones posteriores a la prensa, el que fuera gobernador del Banco de España entre 2000 y 2006 ha defendido la gestión de los bancos centrales durante la crisis, porque, si no, "la situación sería mucho más complicada" ahora.

El mundo, en una "etapa de transición"

En su conferencia, Caruana ha considerado en su conferencia que el mundo se encuentra en "una etapa de transición" -aunque la crisis financiera empezó hace diez años- y ha apuntado que la nueva normalidad será diferente a la anterior, pero no se sabe todavía cómo será.

Asimismo, ha señalado que para reducir el riesgo "sistémico" del panorama mundial los bancos deben aumentar la capacidad para absorber riesgos, se debe hacer que los mercados de derivados financieros sean más resistentes y mantener la actividad vital de los bancos que funcionan incluso cuando fallan.

En todo caso, ha apuntado que el desendeudamiento es parte de la solución, y es más optimista que otros organismos respecto a la tendencia a la baja de la productividad y la rentabilidad: "Creo que, con la combinación correcta de políticas, podemos aumentarlas".

Caruana también ha indicado que uno de los motivos de la crisis es que no se pensó a largo plazo, por lo que hay que "pensar más allá de los próximos meses" en la toma de decisiones. En este sentido ha incidido en que los riesgos sistémicos están cambiando y hay que contar con "cojines" de seguridad antes de que llegue la próxima crisis, para poder afrontarla y reaccionar con celeridad.

Ha puesto ejemplos de desafíos, como la "ilusión de liquidez" en los mercados, con miles de órdenes que se cancelan en cuestión de microsegundos; y, en el sector financiero, ha ejemplificado que los bancos operan globalmente pero quiebran nacionalmente.