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Don Cheadle se transforma en Miles Davis en el Festival de Berlín

  • El actor interpreta a la leyenda del jazz en su debut como director

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El actor estadounidense Don Cheadle, durante la presentación de la película 'Miles Ahead' en el Festival Internacional de Cine de Berlín.
El actor estadounidense Don Cheadle, durante la presentación de la película 'Miles Ahead' en el Festival Internacional de Cine de Berlín.

El actor estadounidense Don Cheadle ha presentado en la Berlinale Miles Ahead, un filme en el que, además de debutar como director, asume un papel protagonista y donde se retrata a Miles Davis como un eremita, con Ewan McGregor alegrándole la vida.

"Elegí esa fase de la vida de Miles no sólo porque cinematográficamente funciona bien, sino también porque me permitía no encerrarme en un solo aspecto, sino presentar cómo se recuperó de ella, completamente reforzado, más creativo que nunca", explicó Cheadle.

Su filme, combinación de retrato biográfico y ficción argumental, presenta a un Miles Davis maduro, consumido por el abuso de cocaína y por el recuerdo de un gran amor -Frances Taylor, interpretada por Emayatzy Corineald-. Vive recluido en su casa en Nueva York, tratando de organizar su vuelta al escenario tras cinco años de sequía, cuando irrumpe en su existencia un periodista (McGregor), al que de entrada rechaza de un puñetazo, pero al que luego adopta como contrapunto vital y compañero de vicios -alcohol, tabaco y drogas-.

Cheadle envuelve a ambos en una trama que va del robo de la grabación original con que prepara su retorno a sucesivos enredos con gente de mal vivir, salpicada por los recuerdos del amor perdido, la melancolía y, por supuesto, la trompeta de Davis.

Es una película que se nutre de la fascinación por la leyenda del jazz, por su música y su talento para la improvisación, pero también del magnetismo de sus míticos derrumbes físicos, mentales y creativos.

"Puse toda la música de Miles que pude y se me permitió por derechos de autor. Su música es el mejor complemento posible a la narración.  Es emoción, es pasión, es a la vez reflejo de un derrumbe humano y de un talento inabordable", afirmó Cheadle.

Del ritmo trepidante de las escenas del presente se salta continuamente a la melancolía por el pasado, en una película en que Cheadle ha invertido muchas energías y dinero; es director, actor, guionista y además coproductor.

Tal vez demasiados anhelos para un debut en la dirección, del que acaba salvándole, como suele ser, el trabajo de McGregor, tan eficiente como es habitual en él, sea cuál sea el papel que se le ha reservado.

El actor, quien estuvo en Berlín en 2010 como protagonista de El escritor -Oso de Plata a su director, Roman Polanski-, no acompañó esta vez hasta el festival a Cheadle, cuya película se exhibía fuera de concurso, en la sección Berlinale Special. Si estuvo ahí Emayatzy Corineald, estupenda dentro y fuera del escenario.