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Los combates en Alepo provocan una nueva emergencia humanitaria en la frontera siria

  • Cerca de 31.000 personas están atrapadas en la frontera con Turquía
  • Huyen de los bombardeos del régimen sirio, apoyado por Rusia, en Alepo
  • Médicos Sin Fronteras alerta del colapso del sistema sanitario en la frontera

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Los combates en Alepo provocan una nueva emergencia humanitaria en la frontera turca

La ofensiva del régimen sirio en Alepo ha ocasionado el desplazamiento de 31.000 personas, según los últimos datos de la ONU, muchas de las cuales se han dirigido a la frontera con Turquía, donde permanecen atrapadas a la espera de que las autoridades del país vecino les permitan entrar. Médicos Sin Fronteras ha alertado de que este éxodo está a punto de colapsar el sistema sanitario de la localidad siria de Azaz, en el norte de la provincia de Alepo y fronteriza con Turquía.

En un comunicado, la ONG ha explicado que el aumento de los combates en Alepo y el éxodo de habitantes están llevando hasta su límite al ya precario sistema sanitario de Azaz. Ha recordado que hospitales y centros médicos de la población, así como otros ubicados en la zona rural de los alrededores, han sido golpeados por los bombardeos de las últimas dos semanas, entre ellos tres instalaciones sanitarias respaldadas por MSF.

"El distrito de Azaz ha pagado uno de los precios más altos en esta guerra, en la que seguimos viendo cómo la atención médica es asediada", ha dicho la coordinadora general de las operaciones de MSF en Siria, Muskilda Zancada.

Unos 30.000 civiles sirios siguen esperando poder cruzar la frontera con Turquía

Ataques a los centros de salud

La responsable humanitaria ha expresado su "extrema preocupación" por la situación en el sur de Azaz, "donde el personal médico teme por su vida y se ha visto obligado a huir y cerrar los hospitales o a dejar operativos solo algunos servicios de urgencia".

Por ello, la organización ha exigido a las partes en conflicto que tomen las medidas necesarias para evitar más desplazamientos masivos de población e impedir que se agrave la actual crisis humanitaria.

Asimismo, ha instado a poner fin a los ataques contra los escasos centros de salud que todavía funcionan y a cesar los combates y bombardeos en zonas con alta densidad de habitantes, al menos hasta que los civiles puedan refugiarse en áreas seguras con servicios básicos.

MSF ha apuntado que la mayoría de los desplazados por el aumento actual de las hostilidades en Alepo se han trasladado a la frontera con Turquía y asentado en zonas al aire libre alrededor de campos de refugiados que ya albergaban a decenas de miles de personas.

Continúa la ofensiva siria en el norte de Alepo

Niños y ancianos, al aire libre con temperaturas gélidas

En ese sentido, ha alertado de que las organizaciones humanitarias están desbordadas y no serán capaces de gestionar la llegada de más desplazados.

En los campos ya no cabe más gente

"En los campos ya no cabe más gente -ha advertido Zancada-. Los recién llegados, incluidos niños y ancianos, tendrán que quedarse durante días al aire libre con temperaturas gélidas. Eso podría provocar importantes problemas de salud, entre los cuales destaca el riesgo de neumonía".

En ese sentido, la ONG ha expresado su inquietud por la situación de las familias que se localizan fuera de los campos y que casi no han recibido ayuda. Y no se espera que este flujo aumente.

Medio millar de muertos en diez días

Al menos 518 personas han muerto en la provincia de Alepo desde el inicio de una ofensiva de las fuerzas del régimen sirio, el pasado 1 de febrero, en el norte de esa región, ha dicho a Efe el director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abderrahman.

De esas víctimas, al menos 101 son civiles y 89 de ellos perdieron la vida en los ataques de los efectivos gubernamentales, que cuentan con el respaldo de los bombardeos de la aviación de Rusia; otros 12 fallecieron por el fuego de organizaciones armadas opositoras en los pueblos de mayoría chií de Nubul y Al Zahrá.

En los bandos contendientes, hubo al menos 169 bajas en las filas de facciones rebeldes sirias, a las que se suman 105 combatientes, entre los que hay extranjeros, del Frente al Nusra, filial siria de Al Qaeda, y de otros grupos yihadistas que luchan contra las autoridades sirias. En las filas gubernamentales, al menos 143 soldados y milicianos progubernamentales perecieron durante las hostilidades.

Durante esta ofensiva, el régimen, que está apoyado por la Guardia Revolucionaria Iraní, ha avanzado y recuperado el dominio de varias localidades del norte de Alepo, además de romper el asedio de más de tres años impuesto por el Frente al Nusra en torno a Nubul y Al Zahrá.