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El Gobierno reduce la parte regulada del recibo de la luz, que bajará de media un 0,7% desde enero

  • Congela los peajes del gas, cuya factura bajará una media del 3%

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Una lámpara encendida
Una lámpara encendida.

Las facturas de la luz y el gas bajarán una media del 0,7% y el 3%, respectivamente, a partir del mes de enero, según los cálculos realizados por el Gobierno en virtud de las órdenes de peajes de acceso para estos sectores aprobadas este miércoles por la Comisión Delegada para Asuntos Económicos cuatro días antes de las elecciones generales.

En concreto, se ha aprobado la rebaja de los peajes, la parte regulada de la tarifa eléctrica, que -según sus cálculos- permitirá reducir el importe del recibo de la luz una media del 0,7% respecto a diciembre (un 2,8% respecto a enero de 2015) ya que hubo una rebaja intermedia en verano.

En un comunicado, el Gobierno explica que, en el caso de la electricidad, los precios unitarios de los pagos por capacidad -con los que se retribuye a algunas tecnologías por estar disponibles- bajan un 21% a partir de enero. Este concepto regulado -el mismo que se bajó en verano- se encuentra incluido en el término de Energía (es decir, en el precio que se paga por cada kWh que se consume).

La ley del Sector Eléctrico impide que se reduzcan los peajes y cargos mientras exista deuda pendiente -todavía hay más de 22.000 millones de euros por pagar derivados de los años de déficit tarifario-, aunque no se refiere específicamente a esos pagos. El sector eléctrico cerró el año 2014 con un superávit de 550,3 millones de euros, el primero desde 2002.

La orden avalada prevé también un fondo para eventuales contingencias que pudieran afectar a la factura de la luz, como por ejemplo una subida del precio del crudo.

Se congela la parte regulada del recibo del gas

En el caso del gas, el Gobierno ha optado por congelar la parte regulada del recibo. De este modo, según el Gobierno, el gas bajará de media en torno a un 3% para los consumidores acogidos a la tarifa de último recurso gracias al abaratamiento del componente energético en los mercados internacionales.

El Ejecutivo ha insistido en que esta congelación de la parte regulada de la factura, por segundo año consecutivo, es compatible con la garantía de la sostenibilidad financiera del sistema. Y prevé que este año el sistema gasista termine con equilibrio entre ingresos y costes y que, a partir de 2016, registre superávit.