Enlaces accesibilidad

El Gobierno, dispuesto a reformar la Constitución para delimitar las competencias del Estado y autonomías

  • Catalá, abierto a suprimir el aforamiento de diputados autonómicos
  • Cree más complejos los de Congreso y Senado por estar en la Carta Magna
  • No descarta volver a plantear la reforma del aborto la próxima legislatura

Por
Catalá apuesta por una reforma de la Constutución para definir mejor el Estado autonómico

El ministro de Justicia, Rafael Catalá, se ha mostrado dispuesto a modificar la Constitución en algunos casos muy concretos como la delimitación de las competencias del Estado y de las CCAA o la modificación de la actual preferencia del hombre sobre la mujer en la sucesión de la Corona. Catalá también está abierto a suprimir el aforamiento de los diputados autonómicos.

En una entrevista concedida a Europa Press, el titular de Justicia recuerda que la Carta Magna se ha modificado ya en dos ocasiones y cree que "seguramente" hay derechos de "nuevo cuño" que se han "consolidado" en los últimos tiempos y que "podrían tener mejor acogida en la Constitución".

En este sentido, ha señalado que "el Estado autonómico podría definirse mejor" y que transcurridos 37 años de la Constitución de 1978 se podrían "definir mejor cuáles son las competencias del Estado" y "cuáles son las competencias de las CCAA". Según Rafael Catalá, "se podría aprovechar esta experiencia de 37 años para ver cómo se refuerzan los mecanismos de coordinación y cooperación"

Suprimir algunos artículos

En esta línea de aplicar la experiencia acumulada en estos años, el ministro también recordó que en la Constitución hay artículos que tenían una naturaleza "meramente transitoria", por ejemplo, de "cómo se accedía a la autonomía" y eso "ya ha surtido efecto" por lo que, apuntó: "ya no es necesario mantenerlo en esos términos".

También recordó que hay otras cuestiones como las que tienen que ver con la sucesión en la Corona, la preferencia actual del hombre sobre la mujer, que "podría abordarse perfectamente y con un buen consenso social".

"Yo creo que se puede hacer una reflexión tranquila, razonable, fruto de la experiencia de 37 años de convivencia que llevaría a un planteamiento de reforma de la Constitución, sin duda", reflexionó Rafael Catalá, quien, sin embargo, deja claro que este planteamiento está alejado de "eslóganes" y centrado sólo en problemas concretos y "soluciones concretas que vayan encaminadas a reforzar el entramado institucional de la Constitución" y "no a revisar a todo lo que funciona y que funciona bien".

En este sentido, el titular de Justicia advirtió contra las propuestas de otros partidos que no son concretas. Así, citó el caso de Ciudadanos, de los que dijo que "no nos dicen cuál es su modelo"; o el del "estado federal asimétrico", que propone el PSOE u otros, dijo, que rechaza "completamente" y que proponen "revisar la transición".

Revisar los aforados

Rafael Catalá también abordó la polémica sobre el número de aforados que hay en España. Admitió que es un "número muy alto", pero considera que no es "fruto de ningún sistema de privilegios" sino que hay una serie de colectivos profesionales que tienen un tratamiento de enjuiciamiento de sus hipotéticas responsabilidades penales por un tribunal distinto del juez natura porque se encomienda a un juez superior.

Sin embargo, aún reconociendo que se trata de un grupo muy numeroso, considera que se ha generado una debate "artificial" porque, dice, "parecería que el aforamiento es un privilegio" y el ministro considera que no es así, ya que "acorta los niveles jurisdiccionales de recursos posibles". "Quien es enjuiciado por parte del Tribunal Supremo no tiene posibilidad de hacer recursos posteriores", aclaró.

No obstante, admite que este aforamiento se puede revistar para determinadas figuras en el ámbito político. Sore todo, precisó, después de que la sociedad "ha evolucionado en los últimos años hacia una visión crítica del ejercicio de la política, hacia la no permisividad de ningún tipo de privilegio, hacia una mayor transparencia en la política".

Respecto al aforamiento de los diputados y senadores, Rafael Catalá recuerda que éste está recogido en la Constitución. Por ello, explica que "si abrimos un escenario futuro de revisión constitucional, ésta puede ser una de las cuestiones que se planteen", pero señala que es necesario saber que en este caso se está hablando de una reforma de la Constitución "porque eso viene de ahí".

Por lo tanto, señaló que "haría falta un nivel de consenso, un reposo y un tiempo suficiente como para poder analizar no sólo una pieza pequeña como es el aforamiento que está en la Constitución, sino también algunas otras cuestiones que puedan tener que ver con múltiples cuestiones".

La reforma del aborto

Por otro lado, Catalá también se ha referido a la reforma del aborto y ha asegurado que no descarta volver a plantear una reforma de la Ley del Aborto en la próxima legislatura. Aunque ha admitido que "hoy no hay ninguna decisión tomada", ha señalado que en el programa electoral del PP para las elecciones generales habrá un "compromiso" con los ciudadanos acerca de lo que la formación quiere hacer "en los próximos años".

En este sentido, ha subrayado que la reforma del aborto que han aprobado en esta legislatura se ha ceñido al "compromiso" que tenían con los electores y que consistía en "garantizar" que si "una menor de edad se ve en el trance de tener que tomar una decisión de aborto, tenga el apoyo de sus progenitores". Igualmente, ha explicado que el Gobierno ha desarrollado también "una serie de políticas sociales, de apoyo a la familia, de apoyo a la mujer y de conciliación de la vida familiar y personal".

De cara al futuro, el titular de Justicia ha recordado que el PP está preparando el programa electoral que presentará a las elecciones de final de año. "Y saldremos ahí con un compromiso con los ciudadanos sobre lo que queremos hacer en los próximos años. Ese trabajo aún no está cerrado, es un poco prematuro anticipar en esta materia concreta cuáles van a ser las líneas", ha apostillado.

Al ser preguntado si considera que se han perdido cuatro años con este tema por la forma en que se ha gestionado, Catalá ha recalcado que "más que un fracaso político es una manifestación de compromiso con la calidad democrática por parte del Gobierno".

Así, ha señalado que el PP en esta legislatura ha contado con "mayoría suficiente para promover una ley" que podría haber llevado adelante, pero ha elogiado el "ejercicio de calidad democrática" que realizó el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, al reconocer que "no había consenso suficiente para ir en esa dirección".

A su entender, esa manera de proceder evidencia que en aquellos "grandes temas" que afectan a la sociedad española, quieren "generar el mayor consenso posible". "No creo que pueda calificarse de fracaso sino de convicción de que las grandes reformas hay que hacerlas con el consenso de, al menos, los grandes partidos políticos", ha abundado.

Al ser preguntado si hace bien el Tribunal Constitucional en no dictar sentencia sobre la Ley de Plazos toda vez que el Poder Legislativo, teniendo capacidad para derogar la ley, no lo ha hecho, el ministro ve bien que el alto tribunal no dicte sentencia hasta después de las elecciones generales.