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Un tribunal egipcio confirma la condena a muerte de 11 acusados por la masacre de Port Said

  • La condena fue dictada en abril y remitida al muftí de la República
  • El máximo líder religioso de Egipto ha emitido su opinión sobre el fallo

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TRIBUNAL EGIPCIO CONDENA A MUERTE A 11 PERSONAS POR LOS DISTURBIOS EN UN PARTIDO DE FÚTBOL QUE CAUSÓ 74 MUERTOS
Fotografía de archivo de 2012 que muestra a los enfrentamientos entre seguidores egipcios y policías durante un partido de fútbol disputado en el estadio de Port Said (Egipto)

Un tribunal egipcio ha confirmado este martes la sentencia dictada en abril de pena de muerte a 11 hombres por su participación por su implicación en unos violentos disturbios ocurridos en febrero de 2012, durante un partido de fútbol, en los que murieron 74 personas y 254 resultaron heridas.

El pasado abril, el tribunal dictó sentencia de pena de muerte para los acusados, aunque la remitió al muftí de la República, Shauqi Alam, máxima autoridad religiosa del país, para que emitiera una opinión no vinculante al respecto, aunque un paso previo para la aplicación de la sentencia. El veredicto aún puede ser recurrido ante el Tribunal de Casación, que es el último recurso posible en el sistema de justicia egipcio.

Este es el segundo proceso que se celebra sobre el caso, después de que el 6 de febrero de 2014, el Tribunal de Casación egipcio anulara un fallo anterior en el que se había condenado a muerte a 21 acusados por el caso de la masacre del estadio de fútbol de Port Said (noreste del país).

La masacre del estadio de Port Said

Los detenidos por este caso fueron condenados en enero de ese año a distintas penas: 21 personas fueron sentenciadas a muerte, cinco a cadena perpetua, 19 a distintas penas de prisión y otras 28 fueron absueltas. Estaban acusados de perpetrar, intentar y ser cómplices en delitos de asesinatos premeditados y con alevosía.

La mayor tragedia en la historia del fútbol egipcio ha dejado en la ciudad mediterránea de Port Said al menos 74 muertos y sacudió a un país al borde de un ataque de nervios que atraviesa por una transición plagada de catástrofes. La salvaje batalla entre los aficionados del club local, Al Masry, y los del equipo rival, el cairota Al Ahly, estalló nada más pitar el árbitro el final del partido que habían ganado los primeros por 3 goles a 1. El Partido Libertad y Justicia (PLJ), brazo político de los Hermanos Musulmanes, ha acusado a los partidarios del antiguo régimen de Hosni Mubarak de los disturbios.

La mayoría de los muertos en la tragedia de Port Said eran hinchas del club Ahli, el más popular de Egipto, que quedaron atrapados en la ratonera en que se convirtió el estadio de Port Said al ser atacados por los aficionados del equipo local, Al Masri, ante la pasividad de la policía.