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La llegada de inmigrantes irregulares a las costas de España aumentó un 40,6% en 2014

  • Un total de 4.552 migrantes llegaron en embarcaciones a las costas españolas
  • En ese período, por el Mediterráneo central intentaron entrar 170.000
  • Hubo un 77% más de intentos de salto de las vallas de Ceuta y Melilla
  • Más de 3.300 personas llegaron a Ceuta y Melilla procedentes de Siria

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Un grupo de inmigrantes que viajaba en pateras, rescatado por Salvamento Marítimo, llega al puerto de Tarifa (Cádiz), el pasado 25 de mayo.
Un grupo de inmigrantes que viajaba en pateras, rescatado por Salvamento Marítimo, llega al puerto de Tarifa (Cádiz), el pasado 25 de mayo.

La llegada de inmigrantes irregulares a España aumentó un 40,6% durante 2014, según los datos facilitados este viernes por el Ministerio del Interior. Según Interior, llegaron a las costas españolas 4.552 inmigrantes irregulares frente a los 3.237 que lo hicieron en 2013, lo que supone un aumento del 40,6%, es decir, 1.315 más que en el mismo período del año pasado.

Así se desprende del Balance de Lucha contra la Inmigración Irregular difundido este viernes por el Ministerio del Interior, según el cual, frente a la reducción del 12% experimentada en las llegadas por vía marítima en 2013 y a la del 18% que se había producido un año antes, en 2014 se produjo este repunte que supuso la llegada de 1.315 personas más. No obstante, indican, "este aumento no altera en modo alguno la tendencia decreciente que se viene manteniendo año tras año".

No obstante, las cifras siguen por debajo de las registradas en la época de mayor intensidad, el año 2006, y contrastan con las que arroja el Mediterráneo central: 170.000 personas solo en 2014.

De las personas que llegaron por esta vía marítima, 4.256 lo hicieron a las costas de la Península y Baleares. El resto, 296, arribaron a Canarias. En total, la cifra está un 88% por debajo de la que se registró en 2006, cuando 39.180 migrantes arribaron a España.

Miles de personas procedentes de Siria

La llegada a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla de más de 3.300 personas procedentes de Siria -es decir, potenciales refugiados- fue la principal novedad que provocó el aumento destacado en 2014 de los flujos migratorios en Ceuta y, especialmente, en Melilla.

En total, Interior ha computado la llegada de 7.485 inmigrantes irregulares a Ceuta y Melilla. Supone un aumento del 77% en la entrada de extranjeros de forma irregular, 3.250 más que un año antes, cuando pasaron 4.235 personas de las que 273 eran sirias. Si se compara con 2005, el incremento es del 34%.

El pasado año también se registraron cerca de 19.000 intentos de asalto al vallado de Melilla (un 350% más que 2013). Interior destacó que "gracias a las medidas disuasorias y a la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el 90% de los asaltantes no accedieron a Ceuta y Melilla" saltando las vallas de ambas ciudades.

Esta cifra no equivale a un número de personas, ya que es frecuente que un mismo individuo intente pasar en más de una ocasión. Se calcula sobre el terreno contando por aproximación el número de personas que tratan de superar el vallado fronterizo.

Un 12% menos de repatriaciones

Por otra parte, el balance indica asimismo que España repatrió el año pasado a 20.993 inmigrantes, un 12% menos que en 2013. Interior explica esta caída en comparación con el aumento de las llegadas porque el grueso de las mismas eran de ciudadanos sirios, cuyo país lleva cuatro años en guerra.

De estas repatriaciones, 8.109 se produjeron por denegación de entrada en puertos y aeropuertos, 1.067 fueron readmisiones a países de origen con los que existen convenios; 4.121 fueron devoluciones -figura de la Ley de Extranjería que se aplica con los interceptados en puestos fronterizos no habilitados-, y 7.696, expulsiones a través de expedientes administrativos derivados de la estancia ilegal en España.

Del total de expulsiones llevadas a cabo en 2014 (7.696), 6.557 fueron cualificadas (el 85%), es decir, personas con algún antecedente lo que significa un aumento del 1% respecto del año anterior. El 15 por ciento restante, 1.139, fueron de personas que estaban en situación irregular en España.

"Con estas cifras, se consolida la política del Ministerio del Interior que prioriza las expulsiones cualificadas (personas vinculadas a actividades delictivas) y no la de los extranjeros en mera situación irregular en España", explica el departamento que dirige Jorge Fernández Díaz.