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Colombia recuerda a su Nobel de literatura al grito de "¡Gabo vive!"

  • La cultura colombiana recuerda al autor de Cien años de soledad
  • Macondo y las mariposas amarillas han marcado el aniversario de su muerte
  • La situación política en el país ha alejado al presidente de los actos oficiales

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Una mujer pega una mariposa de papel amarillo con sus recuerdos sobre Gabriel García Márquez en una librería de Ciudad de México.
Una mujer pega una mariposa de papel amarillo con sus recuerdos sobre Gabriel García Márquez en una librería de Ciudad de México.

Colombia se ha asomado de nuevo a la obra de su nobel, Gabriel García Márquez, al cumplirse el primer aniversario del fallecimiento del "hijo del telegrafista", una jornada en parte oscurecida por la macondiana situación política del país que se debate entre la guerra y la paz.

El tributo se ha iniciado con sus mariposas amarillas inundando las redes sociales, una idea que ha partido del Ministerio de Cultura colombiano que ha llevado a Twitter el proyecto "#Gabovive" con el que ha recordado su figura y que se ha convertido en primera tendencia del país en esa red social.

"Cuando descubrimos a Macondo, conocemos a la familia Buendía y nos enamoramos de las mariposas amarillas ¡A leer!", ha tuiteado el Ministerio junto a una gran foto de Gabo rodeado de esos lepidópteros que circundaban en enjambres a Mauricio Babilonia en Cien años de soledad.

"Escribía como Cervantes y hablaba como Chaplin"

Durante la presentación de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, que comenzará el 21 de abril con Macondo como tema central, el biógrafo de García Márquez, el británico Gerald Martin, ha acaparado los focos con sus sentencias derivadas del conocimiento exhaustivo del escritor: "Escribía como Cervantes y hablaba como Chaplin", ha aseverado sobre Gabo.

Él es el "gran clásico latinoamericano"; Macondo es "la primera aldea global literaria"; Gabo "será top en los próximos 500 años" como Shakespeare y Cervantes lo han sido en las centurias precedentes, ha desgranado el también biógrafo del guatemalteco Miguel Ángel Asturias, ganador del Nobel de Literatura en 1967, quien ha apuntado que desde que lo leyó se dio cuenta de que Macondo iba a ser La Mancha de Cervantes.

Este ha sido el preludio de una feria que el martes abrirá las puertas a los visitantes con mapas y pabellones dedicados a Macondo en una evocación del realismo mágico que se inspira más que nunca en una Colombia paradójica en la que la sangre sigue manando como en las obras de Gabo.

La violencia enturbia el recuerdo del literato

No en vano, el proceso de paz entre el Gobierno y las FARC camina por el albero tras el ataque de esa guerrilla que segó la vida de once militares el pasado miércoles pese al cese el fuego unilateral que el grupo rebelde había iniciado en diciembre de 2014.

Los vaivenes del proceso que, tras más de medio siglo de enfrentamiento armado debe conducir a Colombia a la paz y configurar así uno de los grandes sueños de García Márquez, ha deslizado a Gabo a un lado de la prioridad informativa y política del país.

El presidente Juan Manuel Santos, que dedicó homenajes al nobel de Literatura de 1982 hace un año cuando Gabo falleció en Ciudad de México, e incluso asistió a sus funerales en ese país, no ha hecho este viernes ninguna mención al autor ni en sus discursos ni en las redes sociales en las que es muy activo.

Las teclas que descubrieron Macondo

El aniversario, sin embargo, sí ha encontrado un hueco para la inauguración esta noche de la exposición "Un espejo del mundo", en la Biblioteca Nacional de Bogotá, con el ambicioso objetivo de acercar la figura humana de Gabo y atrapar nuevos lectores para la obra del escritor.

Para conseguir ese destino, la institución expondrá la máquina con la que García Márquez dio a luz Cien años de soledad, su obra cumbre, así como la medalla y el diploma que le otorgó la Academia Sueca.

Fotografía de la máquina de escribir con la que el Nobel de Literatura escribió Cien años de soledad. AFP PHOTO/Eitan Abramovich

Más allá de los homenajes institucionales, la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano (FNPI) ha rendido tributo a su fundador y ha renovado su compromiso con él.

"Gabriel García Márquez está con nosotros de manera intensa. No hemos tenido tiempo de extrañarlo, porque no ha pasado ni un solo día sin que sea homenajeado o que ocupe los temas en las noticias, en las redes sociales, en las calles", ha señalado en un mensaje a través de su web.

La FNPI, que este año celebra su 20 aniversario, ha destacado que las "manifestaciones de cariño hacia Gabo" les animan a mantener el compromiso adquirido con el nobel: "trabajar por un periodismo de excelencia con valor de servicio público".

"No ha sido un año de ausencia sino de una presencia distinta, renovada e inspiradora", han subrayado.