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'Billete sin retorno' en el MoMA, el éxodo que enterró la esclavitud afroamericana

  • El MoMA rememora la gran migración afroamericana desde el sur hacia el norte
  • La muestra gira en torno a la obra de referencia Migration Series de Lawrence
  • Podrá visitarse entre los días 3 de abril y 7 de septiembre

Por
Dorothea Lange, "On the Road to Los Angeles, California". (1937)
Dorothea Lange, "On the Road to Los Angeles, California". (1937)

La abolición de la esclavitud no supuso el fin inmediato de las desdichas para la población negra de los Estados Unidos. Trasladar la legalidad de la igualdad de derechos a la realidad de los hechos fue algo progresivo en el norte y una falacia en el viejo sur. Clavados en el tiempo, en los estados segregacionistas el negro estaba más cerca de una bestia de carga que de un ciudadano de una de las democracias más avanzadas.

Pero con la ley en la mano, el camino hacia la dignidad apuntaba al norte. El comercio generado por las guerras mundiales dispararon la producción industrial y la demanda de mano de obra en las pujantes fábricas de estados como Chicago o Nueva York. Libres de las cadenas oficiales, entre 1910 y 1970 casi seis millones de afroamericanos abandonaron el sur de los Estados Unidos en lo que se conoce como "La Gran Migración", una suerte de éxodo liberador de dimensiones bíblicas que como tal, quedó grabado en la memoria colectiva de los norteamericanos de raza negra.

Así fue narrado en la literatura, el cine, la música y el arte. Y precisamente fue en la expresión plástica donde se produjo el que se considera relato de referencia de este proceso histórico: Migration of the Negro series, una colección de 60 témperas pintadas entre 1940 y 1941 por el artista afroamericano Jacob Lawrence (New Jersey, 1917- Washington, 2000). Por primera vez en 20 años, esta obra completa podrá admirarse reunida en la exposición Billete sin retorno: Serie de la Migración de Jacob Lawrence y otras visiones del gran éxodo hacia el norte. Organizada por el MoMA neoyorquino, la muestra estará abierta al público entre el 3 de abril y el 7 de septiembre.

Un capítulo en la Historia, y un artista

"Cuando eres joven no tienes conciencia de lo que has hecho y es luego cuando añades otra dimensión", explicaba el autor sobre su obra en una entrevista mantenida en 1968 para la publicación Archivos del arte americano, integrada en la Smithsonian Institution. Y añadía a continuación: "Supongo que quería mostrar lo que en Europa podría entenderse como la 'clase campesina' en América. Y fue un gran drama épico el que aquí tuvo lugar. Creo que nuestra historia como negros es uno de los puntos centrales de este drama que como americanos hemos vivido".

Pero Jacob Lawrence fue ante todo un artista. Nacido en Atlantic City, sus padre y su madre fueron dos migrantes de los primeros tiempos. Procedentes de Carolina del Sur y de Virginia respectivamente, libres del yugo del campesinado forzoso, las aptitudes de su hijo pudieron ser identificadas por profesores que alentaron su formación. Lawrence fue un artista dotado al que, como él reconoció, "el espíritu de los tiempos" marcó la temática. Y el talento convirtió su expresión artística en cimiento de conciencia colectiva de una comunidad.

En esos tiempos de búsqueda, el ejercicio del arte también fue un ámbito con ajustes pendientes como poner en valor el talento y descartar definitivamente la condición racial. Como pintor, Lawrence constató como la atención de la comunidad de artistas blancos empezaba a considerar seriamente a los artistas negros "como fuente, como una fuente de expresión artística a la que nunca se había tenido en cuenta a nivel nacional".

Evento social y cultural

Los paneles, además de la numeración, llevan en el título un relato descriptivo de la situación que inspira cada pintura: "Centenares de negros fueron abandonando los pueblos para ir a la las ciudades industriales del norte", o "La migración fue alentada por el tratamiento de los amos granjeros en las plantaciones".

Portadas de publicaciones ilustrando el fenómeno, fotografías de la época y obra plástica de otros autores integran también la exposición, que también incluye literatura, música, textos de carácter sociopolítico, proyecciones cinematográficas y una variedad de eventos. El acontecimiento se enmarca en el centenario del inicio de estos movimientos migratorios. Un éxodo que reformuló el tejido social norteamericano y germinó en la realidad social y cultural estadounidense que hoy en día conocemos.

La mitad de la colección se encuentra en el MoMA y la otra mitad en la Phillips Collection, donde puede consultarse online, así como resúmenes y material documental relacionado con el autor. En una carambola del destino, Migration of the Negro series se expuso por primera vez el 7 de diciembre de 1941, el mismo día que se produjo el ataque a Pearl Harbour. Puntos y aparte que unen y hacen cambiar de rumbo a la vez al arte y la historia. Dos años antes, en 1939, John Steinbeck publicaba Las uvas de la ira. Es el relato de otro gran éxodo épico contemporáneo de La Gran Migración y con el que, trazado en la dirección este-oeste, conforma una cruz de supervivencia. En este caso, de la población blanca empobrecida por la crisis de 1929. Razas diferentes, norte, sur, este y oeste. El hombre y el mundo, en pocas palabras.