Enlaces accesibilidad

Uno de los dos rehenes del secuestro de Sidney murió por disparos de la policía

  • Katrina Dawson murió por el rebote de las balas disparadas por la policía
  • La investigación busca fallos de seguridad y detalles de las muertes
  • El juez: "Si ha habido errores en la gestión, éstos serán expuestos"

Por

Uno de los dos rehenes fallecidos durante el secuestro de una cafetería en Sídney el pasado 15 de diciembre murió a consecuencia del rebote de las balas disparadas por la policía, según ha hecho público este jueves uno de los investigadores de los hechos.

"La señora Dawson fue golpeada por seis fragmentos de las balas", ha señalado Jeremy Gormlry, el asistente del juez que preside la investigación que ha explicado que el otro rehén fallecido fue asesinado por el secuestrador con un tiro en la cabeza.

Este asesinato fue visto por un policía francotirador "lo que resultó en la orden inmediata de forzar la entrada a la cafetería", ha explicado.

Katrina Dawson, abogada de 28 años y madre de tres niños, y el gerente del local, Tori Johnson, de 34 años, perdieron la vida durante el asalto policial al establecimiento tomado por el autoproclamado clérigo iraní Haron Monis.

Monis, refugiado iraní quien antes del incidente ya estaba fichado por la justicia australiana, recibió 22 tiros por parte de los agentes de la Unidad de Operaciones Tácticas.

Cuestiones relevantes a la seguridad actual

"Las circunstancias en que ocurrieron esas muertes (de los rehenes) ponen sobre la mesa cuestiones relevantes a la seguridad actual y la sensación de seguridad de la población y eso demanda una respuesta rápida", ha remarcado Michael Barnes, juez de la instrucción estatal que preside la investigación, en el discurso de apertura.

La investigación se centrará en los detalles de la muerte, los asuntos de seguridad relacionadas con Monis como su vigilancia, su libertad condicional y su salud mental, así como si el secuestrador tenía vínculos terroristas.

También serán parte de este proceso la gestión de las demandas y la situación de los rehenes, el papel de las redes sociales y si las muertes pudieron ser evitadas, entre otros aspectos.

Barnes ha expresado sus condolencias a los familiares y amigos de los fallecidos y ha alertado que a pesar de que en el transcurso de la investigación se dé la impresión de ser muy "clínicos" o "impasibles" no supone que se ha olvidado el dolor y el duelo de la gente.

Los rehenes, claves en la investigación

El asistente del juez ha manifestado que "mucha información provendrá de los rehenes" debido a la ausencia de las cámaras de seguridad dentro del café, aunque se tienen imágenes de lo que pasó fuera de él.

También ha agregado que "si ha habido errores en la gestión del secuestro, éstos serán expuestos".

Los gobiernos de Australia y del estado de Nueva Gales del Sur también investigan de forma conjunta cómo Monis pudo acceder a un arma, la información que tenían sobre él las agencias de seguridad y las razones por las cuales se le otorgó la libertad condicional en el caso del asesinato de su exesposa y las acusaciones por delitos sexuales.

Asimismo la Policía investiga las acciones de los agentes durante el secuestro. El ministro de la Policía de Nueva Gales del Sur, Stuart Ayres, comentó hace unos días que esta investigación ayudará a entender qué paso realmente en el café Lindt, situado en pleno corazón financiero de la ciudad de Sídney, pero aseguró que se siente orgulloso del trabajo de las fuerzas de seguridad en esta tragedia.