El Gobierno cree que España tendrá una inflación negativa todo el año debido a la caída del petróleo

• El país lleva un semestre de caída de precios, lo que le acerca a la deflación
• Llegaría, de forma técnica, si encadena otros seis meses de tasas negativas
• El Ejecutivo descarta la deflación. no hay una caída generalizada de la demanda
• Los sindicatos piden una mejora salarial y un cambio de modelo productivo
• USO: hay riesgo de que el consumo se paralice si siguen bajando los precios

El Gobierno espera tasas de inflación negativa durante todo el año 2015 por la caída del precio del petróleo. Así lo ha asegurado este jueves el secretario de Estado de Economía y Apoyo a la Empresa, Íñigo Fernández de Mesa, en la rueda de prensa donde ha analizado los datos del IPC de diciembre.

El número dos de Economía ha indicado que "las expectativas son que, como consecuencia de la reducción del precio del petróleo, sigamos en tasa negativas en 2015". "Podremos ver una primera parte del año donde se alcanzarán las cotas máximas negativas y cuando vaya transcurriendo el año se van a ir reduciendo", ha explicado.

De cumplirse las previsiones del Ejecutivo, y como España ya lleva un semestre de caídas de precios, el país entraría en deflación técnica en junio de 2015. Según el FMI, la deflación es una caída de los precios en el conjunto de la economía que se prolonga durante varios períodos (al menos dos semestres según la definición del Fondo Monetario Internacional) y es el fenómeno contrario a la inflación.

Desde el Ministerio de Economía se ha rechazado que se vaya a llegar a este punto: aseguran desde el Departamento de Luis de Guindos que para poder hablar de deflación también tiene que registrarse una caída generalizada de la demanda, algo que no se está produciendo a su entender.

Además, Fernández de Mesa ha recordado que la inflación subyacente -la que no tiene en cuenta los precios de los alimentos no elaborados ni la energía- no ha cerrado el año en negativo, sino en el 0%, lo que demuestra a su entender que lo que se mantiene es el entorno de estabilidad de precios iniciado hace más de un año.

Los sindicatos piden mejora salarial y cambiar el modelo económico

Mientras, las principales centrales sindicales han solicitado una subida salarial. En un comunicado, CC.OO. ha dicho que la creación de empleo de calidad y la mejora de los salarios son la mejor receta contra la deflación y ha considerado además que, para apuntalar la recuperación, el Gobierno debe apostar por un "ambicioso plan" de inversiones para España y a nivel europeo, en la línea del que viene defendiendo la Confederación Europea de Sindicatos.

Asimismo, Comisiones Obreras considera "imprescindible" adoptar nuevas medidas que refuercen la protección social, especialmente de aquellos sectores de la población que carecen de recursos económicos. "La ayuda económica a los desempleados sin ingresos y con cargas familiares es un primer paso", ha señalado.

Por su parte, UGT ha asegurado que el dato de diciembre "refleja que la deflación se ha instalado" en la economía española, "lo que ensombrece la supuesta recuperación" y "más aún" la situación de las familias. En un comunicado, el sindicato indicó que "la falta de crédito, el continuo deterioro de los salarios y pensiones y la alta precariedad del empleo que se crea hace que el consumo interno no remonte".

La organización defendió que "para crecer más y de forma más equilibrada es necesario más y mejor empleo y potenciar un cambio de nuestro modelo de crecimiento".

Mientras, la Unión Sindical Obrera (USO) ha advertido de que el consumo corre el riesgo de paralizarse si los precios siguen en negativo como en los últimos seis meses, una situación que puede traer consigo efectos negativos en la maltrecha economía española.

Por su parte, el presidente de CEPYME y vicepresidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha afirmado que el dato de IPC de diciembre tiene "varias lecturas", entre ellas una "muy positiva" como es la reducción de la factura energética para España. En rueda de prensa, ha recordado que con el barril a 50 dólares, la factura energética de España hasta los 22.000 millones de euros, ahorrándose "miles de millones".

"Los datos no son malos. Nosotros pensamos que los datos, en principio, son buenos, positivos", ha insistido el presidente de CEPYME, que acto seguido ha indicado que los costes, entre ellos los laborales, deben seguir moderándose.