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El Parlamento Europeo aprueba de forma definitiva el presupuesto de la UE para 2015

  • Rebaja las propuestas para gastos de la Comisión Europea
  • También aprueba 4.800 millones adicionales para pagar facturas de 2014
  • Deberá rectificarse para destinar fondos al plan de inversión de Juncker

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Los eurodiputados votan en la última sesión plenaria de 2014
Los eurodiputados votan una de las normas llevadas a la última sesión plenaria de 2014.

El pleno del Parlamento Europeo ha aprobado este miércoles el presupuesto de la Unión Europea para 2015, con un diseño final más ajustado que las propuestas de la Comisión Europea. También ha dado luz verde a una dotación adicional de 4.250 millones de euros para pagar las facturas pendientes de 2014.

A favor del presupuesto han votado 443 eurodiputados, mientras que 7 han votado en contra y 50 se han abstenido.

Deberá rectificarse para arrancar el plan Juncker

Sin embargo, el proyecto aprobado este miércoles aún deberá ser modificado para incluir el plan impulsado por el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.

"Esperamos ahora la rectificación del presupuesto que abrirá la vía para crear el plan de inversiones", ha indicado el presidente de la comisión presupuestaria de la Eurocámara, el lilberal francés Jean Arthuis.

Según la propuesta de Juncker, 16.000 millones de euros de los fondos presupuestarios deberán reconducirse para utilizarlos como garantías para impulsar proyectos y atraer inversión privada y de los Estados conb el objetivo de movilizar un total de más de 300.000 millones. Otros 5.000 millones deberán salir de las arcas del Banco Europeo de Inversiones.

Equivale a poco más del 1% del PIB de los Veintiocho

Las cuentas que han salido adelante sitúan en 141.200 millones de euros el nivel de pagos, es decir, el monto anual máximo que podrá desembolsarse para abonar compromisos actuales y pasados. Esta cantidad es superior en 2.200 millones de euros a la que destinada al mismo fin en 2014. Este presupuesto equivale a algo más del 1% del PIB del conjunto de la UE.

Respecto a los compromisos -el importe máximo de pagos futuros a los que se puede comprometer la Unión Europea durante un año-, se cuantifican en 145.300 millones de euros.

El Ejecutivo comunitario presentó el pasado 28 de noviembre un nuevo proyecto de presupuesto europeo ante el fracaso del anterior, que no logró el visto bueno del Parlamento Europeo. El primer borrador presentado en junio planteaba unas cuentas con unos pagos de 146.420 millones de euros, lo que suponía un 8,1% más que en 2014, y unos compromisos de 146.380 millones, es decir, un 2,6% más que en las cuentas de este año.

Después de semanas de intensas negociaciones, la Comisión Europea consiguió conjugar las exigencias de Gobiernos nacionales y Eurocámara y lograr un acuerdo el pasado día 8 que ha sido respaldado este miércoles en la última sesión plenaria del año del Parlamento.

Más de 20.000 millones de facturas pendientes

La cantidad en facturas pendientes acumuladas ha aumentado desde los 5.000 millones de euros de 2010 a los más de 23.000 millones en 2014, por lo que la Eurocámara ha centrado la mayor parte de su estrategia negociadora en aumentar la partida para pagos pendientes.

Con ese mismo objetivo, los negociadores del Parlamento han condicionado su visto bueno al acuerdo a que la Comisión Europea presente un plan en 2016 para reducir hasta niveles sostenibles el número de facturas impagadas por la UE.

La mayor partida del gasto presupuestario se destina a agricultura y recursos naturales, que suman 56.000 millones de euros, seguida de la dedicada a políticas de cohesión económica, social y territorial, que suponen 51.100 millones.

Al final de la negociación, los presupuestos del año que viene destinan 45 millones de euros adicionales a la investigación y desarrollo, y otros 16 millones de euros más para intercambio de estudiantes a través de programas como el Erasmus+.

También se ha incrementado en 32 millones de euros la partida a política exterior. Además se han aumentado en cantidades que aún deben ser publicadas las dotaciones para el funcionamiento de la agencia para el control de fronteras, Frontex, y para la aplicación de la supervisión bancaria.

Insatisfacción de los eurodiputados

Tras el acuerdo por el presupuesto, el presidente de la comisión de Presupuestos de la Eurocámara ha lamentado las dificultades para que los países se comprometan a contribuir al presupuesto europeo con el objetivo de reducir al máximo el número de facturas pendientes. "Sabemos que los Estados tienen sus propios problemas financieros, pero los contratos hay que cumplirlos y pagar", ha señalado.

La eurodiputada española y miembro de la comisión de Presupuestos Eider Gardiazabal (PSOE) ha afirmado que, aunque esperan que el presupuesto represente un impulso sustancial para el crecimiento y, especialmente, para las pymes, "esta lejos de lo que queríamos".

El también eurodiputado de esa comisión parlamentaria Pablo Echenique (Podemos) ha considerado que estas cuentas abren la puerta "a que siga el libre comercio sin redistribución ni solidaridad, la receta perfecta para la desigualdad y para seguir abriendo la brecha entre el norte y el sur de Europa".