Aprobadas las comparecencias de Pujol y de los ministros Montoro y Fernández Díaz

• Lo ha aprobado la comisión de investigación del Parlament sobre el caso Pujol
• La comisión no citará a declarar a ningún conseller ni exconseller

El expresidente catalán Jordi Pujol durante su comparecencia en el Parlament.

La comisión de investigación del Parlament sobre el caso Pujol y el fraude fiscal ha aprobado este viernes la comparecencia de los ministros Cristóbal Montoro y Jorge Fernández Díaz, pero de ningún conseller del Govern, y tal y como se esperaba, también deberán comparecer el ex presidente Jordi Pujol y diversos familiares suyos.

CiU y PSC han votado conjuntamente para evitar la comparecencia de consellers y ex consellers de ambas formaciones, pero también de condenados o acusados de casos de corrupción, como los del Palau de la Música o Pretoria, mientras que el PP se ha abstenido o votado en contra de la presencia de altos cargos del Estado, lo que no ha impedido que sean citados dos ministros, el director general de Policía, Ignacio Cosidó, y el director del CNI, Félix Sanz Roldán.

Han sido aprobadas, asimismo, comparecencias de diversos empresarios y de directivos de bancos andorranos, así como de fiscales y ex fiscales en calidad de expertos, además de altos cargos de la Agencia Tributaria.

CiU y PSC han unido sus votos para rechazar nombres de gran relevancia que proponían el resto de grupos y, por ejemplo, ni siquiera han aceptado que tuviera que declarar la exsecretaria de Jordi Pujol, Carme Alcoriza.

Sí que serán citados, por el contrario, los ministros de Hacienda, Cristóbal Montoro, y el de Interior, Jorge Fernández Díaz, y el director del gabinete del presidente del Gobierno, Jorge Moragas, así como altos cargos del PP, como María Dolores de Cospedal o el extesorero Luis Bárcenas.

Los protagonistas del caso Método 3 también están en la lista: el director de la agencia de detectives, Victoria Alvarez (expareja de Jordi Pujol Ferrusola), la líder del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, y el exsecretario de Organización del PSC José Zaragoza.

Altos cargos de la Administración central como el director general de la Policía, el director del CNI y el director de la Agencia Tributaria, Santiago Menéndez, también han sido citados.

Ningún conseller o exconseller de la Generalitat ha sido aprobado, en contraste, como también ha sido rechazada con una gran mayoría la presencia de Artur Mas y de su antecesor en el cargo, el socialista José Montilla.

Tampoco han prosperado las peticiones para que acudieran los expresidentes del Gobierno Felipe González y José María Aznar, mientras que sí que han sido citados algunos exministros.

Comparecencia de la familia Pujol

Por lo que respecta a la familia Pujol, tendrán que comparecer de forma obligatoria el expresident, su esposa, Marta Ferrusola, y casi todos sus hijos, excepto Mireia y Maria Pujol.

Personas con altos cargos en la Generalitat mientras Pujol presidía el gobierno catalán, y que estaban consideradas como "muy próximas" a él, no tendrán que comparecer porque CiU y PSC lo han rechazado: es el caso del empresario Javier de la Rosa, Jaume Camps, el exsecretario de Presidencia Lluís Prenafeta o los exconsellers Josep Maria Cullell y Macià Alavedra.

Del mismo modo se ha rechazado la comparecencia de los principales encausados por el Caso Palau de la Música (Félix Millet y Jordi Montull).

Por parte de CiU, la diputada Meritxell Borràs ha apuntado que una comisión de investigación no debe ser un juicio ni tampoco un plató de televisión, y ha ironizado sobre el hecho de que algunos grupos incluyeran comparecientes a dos personas muertas.

Oriol Amorós, de ERC, ha indicado que "la cuestión de fondo no solo es la evasión fiscal sino si el tráfico de influencias hizo que esta familia obtuviera ingresos específicos", y ha recalcado que "el catalanismo tiene que quedar limpio de corrupción".

Jordi Terrades, del PSC, ha apuntado que a su partido no le cuadran algunas explicaciones dadas por Pujol sobre el dinero de su familia y ha expresado la sospecha de que ha habido "una connivencia entre negocios privados, Administración y el partido en el Govern".