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Hamás niega la captura del soldado israelí y Gaza vive otra noche "horrible"

  • Afirma que Israel utiliza el supuesto rapto para justificar sus ataques
  • Las víctimas palestinas superan las 1.600 tras otra noche de bombardeos
  • Israel autoriza a los residentes del norte de Gaza a regresar a la zona

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Israel no negociará más treguas con Hamás

El brazo militar de Hamás ha asegurado esta madrugada que no tiene información sobre un soldado israelí desaparecido el viernes cerca de Rafah, en el sur de la Franja de Gaza, aunque no descarta que sus hombres lo hayan podido abatir en un conflicto que deja ya más de 1.600 muertos palestinos tras otra noche de bombardeos.

"Las brigadas Ezzedine al-Qassam no tienen información sobre este soldado", ha declarado la organización en un comunicado en el que, sin embargo, afirma haber perdido el contacto con uno de sus grupos de combatientes que lucha en la zona donde desapareció el militar hebreo.

El movimiento islamista Hamás ha negado tener conocimiento de la captura del soldado, y varios dirigentes, entre ellos el miembro del buró político de Hamás en Líbano, Osama Hamdán, han acusado a Israel de emplear la supuesta captura del soldado para "justificar sus agresiones contra el pueblo palestino".

Según el portavoz del Ejército israelí, el coronel Peter Lerner, los sucesos ocurrieron en la mañana del viernes cuando "durante el alto el fuego pactado desde las 08.00, soldados del Ejército israelí rastreaban la entrada de un túnel en la zona sur de la Franja de Gaza". En ese momento, "militantes de Hamás salieron del túnel y atacaron por sorpresa a nuestros soldados", relataba Lerner en una conferencia de prensa.

Por su parte, el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, ha vuelto a defender la necesidad de un alto el fuego y ha destacado que el soldado debe ser liberado "inmediatamente" y "sin condiciones".

Una noche "horrible"

Las operaciones israelíes sobre la Franja se han intensificado durante la pasada noche y a primera hora de este sábado, especialmente en la ciudad de Rafah por la búsqueda del soldado israelí.

Efectivos de la policía palestina aseguran que los aviones de guerra y los carros de combate israelíes atacaron con intensidad viviendas y edificios a lo largo y ancho del reducido enclave costero. Los residentes de la Franja relataron vivir una noche "horrible" entre el sonido constante de los drones y las bombas.

En declaraciones a la prensa, Ashraf Al Qidra, portavoz del ministerio de Sanidad, ha dicho que el balance de muertos palestinos en esta jornada asciende a 56 y los heridos a 400.

Desde que Israel lanzó la operación "Margen protector", el pasado 8 de julio, han muerto un total de 1.674 palestinos, dos tercios de ellos civiles, según el citado portavoz, y los heridos rozan los 9.000.

Israel también registra sus peores balances: 59 israelíes han muerto, tres de ellos civiles. Todos los intentos por lograr un alto el fuego han fracasado y ambas partes se acusan de violar los acuerdos de tregua humanitaria. El último de ellos, alcanzado el pasado jueves y que debía durar tres días, saltó por los aires a las escasas horas.

Israel y Hamás rompen el alto el fuego apenas 180 minutos después de su inicio

Israel permite volver al norte de la Franja

Por otra parte, el Ejército israelí ha comunicado a los residentes del barrio de Beit Lahia, situado en el noroeste de la Franja de Gaza, que pueden regresar a la zona, informan fuentes militares en un breve comunicado.

Los habitantes del área pueden retornar pero "se les aconseja que tengan cuidado con los artefactos explosivos que Hamás ha extendido por la zona", señala el comunicado.

Hace más de dos semanas el Ejército israelí pidió a unos 100.000 palestinos de la zona norte de la Franja y de dos vecindarios de la ciudad de Gaza que abandonaran sus hogares "por su propia seguridad", tras lo que cerca de 18.000 palestinos dejaron Beit Lahia.

De esas 18.000 personas, 4.000 buscaron refugio en escuelas de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA), cuyas instalaciones quedaron desbordadas.

A diferencia de otros conflictos bélicos en la región, la población civil no involucrada en el conflicto armado en Gaza no tiene la posibilidad de abandonar por completo las zonas de combate o acudir a lugares seguros y habilitados para desplazados o refugiados.

Esto ha provocado que en los 26 días de operación militar israelí sobre la Franja, cerca de 280.000 palestinos se han convertido en desplazados que buscan alojamiento en escuelas-albergue de la ONU y en edificios públicos.

Además de esta cifra, la Agencia de la ONU para la coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) estimó que al menos otros 200.000 palestinos han sido acogidos por familiares.