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Francia entrega al etarra Basurde, supuesto organizador del atentado en la T-4 de Barajas

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Francia entrega al etarra Basurde, supuesto organizador del atentado en la T-4

El etarra Joseba Araníbar Almandoz, alias "Basurde", supuesto organizador del atentado en la T-4 de Barajas, en el que murieron dos personas, ha sido trasladado a España este martes desde Francia, según ha informado la Dirección General de la Policía española.

Araníbar es reclamado por la Justicia española como supuesto organizador, junto al entonces jefe militar de ETA, Garikoitz Aspiazu Rubina, alis "Txeroki", del atentado contra el aeropuerto madrileño, cometido el 30 de diciembre de 2006.

Araníbar Almandoz fue arrestado en Francia en julio de 2007. La Audiencia Nacional le acusa de dar instrucciones al comando que atentó en la Terminal 4 del aeropuerto de Barajas (Madrid) en 2006.

Está reclamado por delitos de integración en organización terrorista, detenciones ilegales, estragos terroristas, lesiones, asesinato terrorista, robo con violencia e intimidación y secuestro.

La entrega de Aranibar, de 34 de edad y natural de Vera de Bidasoa (Navarra), ha sido concedida a favor de los juzgados centrales de instrucción número 1 y 5 de la Audiencia Nacional.

Detenido en 2007 en Francia

El etarra, que estaba en paradero desconocido desde octubre de 2003, fue arrestado julio de 2007 cerca de la localidad vasco-francesa de Saint Jean Pied de Port cuando circulaban en una camioneta robada y cargada de material explosivo y armas.

La Guardia Civil sospechaba que Araníbar podría haber formado parte del aparato militar de ETA y haber participado en la planificación de las "acciones especiales" cometidas en España. Entre ellas, habría participado en la organización del atentado en la T4 de Barajas que costó la vida a los ciudadanos ecuatorianos Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate.

Por ese atentado ya fueron condenados en 2010 los etarras Mattin Sarasola, Igor Portu y Mikel San Sebastián a 1.040 años de cárcel. Según la Audiencia Nacional, el exjefe de ETA Garikoitz Aspiazu Rubina, alias "Txeroki", y Araníbar como su lugarteniente reunieron a los tres condenados en el monte Auza de Navarra y les propusieron la colocación de una furgoneta cargada de explosivos en el aparcamiento de la T4, dándoles instrucciones para la preparación y el modo de ejecutarlo.