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'El Cielo es real', alegato trascendente y provida desde la América profunda

  • Relata la experiencia cercana a la muerte de un niño de 4 años
  • Éxito de taquilla en Estados Unidos, con 90 millones recaudados

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Tráiler de 'El cielo es real'

Se estrena en España la versión cinematográfica del El Cielo es real, un relato sobre un niño de apenas cuatro años llamado Todd Burpo que narra su extraña experiencia en una nueva realidad tras una operación a vida o muerte. Burpo asegura que en apenas tres minutos visitó el cielo, conoció a Jesús y trató con los ángeles y hasta con personas de su propia familia que fallecieron antes de que él naciera, entre otros, su bisabuelo Pop . A sus catorce años sigue marcado por aquellas vivencias.” Puedes creer lo que quieras, pero yo sé lo que vi”, afirmó tras la presentación del libro El Cielo lo cambia todo, continuación del El Cielo es real.

Entre los productores de la película figura el obispo afroamericano Thomas Dexter, líder de una megaiglesia protestante de Dallas, Texas y estrella mediática. Ha supervisado el guión hasta el más mínimo detalle: ”Todd me lo dejó muy claro: no quería verse en la situación de que su hijo Colton viera la película y le dijera «Papá, yo no dije eso», explica Roth, así que hemos cuidado el diálogo para mantener las palabras exactas de Colton.”

La América profunda

En El Cielo es real todo es normal, aparentemente normal, con personajes corrientes como nosotros, con los que podemos identificarnos en su lucha diaria por salir adelante.

La película nos acerca, por otra parte, a esa América profunda de un pueblo agrícola de Nebraska, llamado Imperial, de apenas dos mil habitantes, donde se acepta un sistema, sus normas y sus valores, entre otros el patriotismo o la religión.

Pero no nos engañemos. Estamos más cerca del mundo idílico que nos ofrece Capra en ¡Qué bello es vivir! y muy lejos, por tanto, de otras propuestas más comprometidas como Las uvas de la ira (1940) de John Ford o más recientemente Nebraska (2013), de Alexander Payne, el viaje iniciático de un hijo y su padre, una anciano, con signos de demencia, que creer haber ganado un premio en un concurso.

Un rostro inquietante

La película empieza con una niña en un desván. Pinta un rostro, empezando por los ojos. Está segura del modelo, aunque no está presente ante ella. Sus trazos son seguros. No duda y demuestra una madurez impropia para su edad. El retrato titulado El príncipe de la Paz lo veremos ya terminado al final de la película. El pequeño Colton, el niño protagonista de nuestra historia, le reconoció sin duda alguna. ”Era Jesús. Así era Él. Así eran sus ojos. Ojos verdes… como los de mis padres”.

Es una forma de unir las historias del pequeño Cotton con la de esta niña, de ocho años, llamada Akiane Kramarik, pintora prodigio, hija de una familia no creyente, educada sin religión en Idaho (aunque su madre es de Lituania).

Los dos, Cotton y Akiane, no se conocen, nunca se han tratado, pero de forma inquietante y sorprendente comparten las mismas experiencias espirituales sobre ese Jesús de ojos verdes, que rompe con toda la iconografía tradicional.

Niño prodigio

Connor Corum es el jovencísimo actor que encarna el papel de Todd Burpo. Tiene seis años y vive en Cleveland, Ohio. Se sometió al casting un poco de casualidad. Fue un capricho de los padres, que no querían por otra parte que su pequeño acabara como otros niños prodigios.

Después de las pruebas, él fue finalmente el elegido. Respondía al niño rubio y de ojos azules que buscaban los productores. Era además natural y funcionó con actores profesionales.

Al pequeño lo que más le ha gustado es verse en la gran pantalla y espera algún día actuar en alguna película del Capitán América. Por el momento, ésta es su primera película, y ya ha intervenido en dos series de televisión.

De 'normal' a historia increíble

La actriz británica Kelly Reilly interpreta a Sonja, la madre de Colton. Su formación teatral le ha ayudado a construir este personaje, una mujer de fuertes convicciones que tratará de mantener unida a su familia ante las increíbles historias de su hijo, que inicialmente atribuyeron a meras alucinaciones.

A cuentagotas, el niño real fue explicando a sus padres lo que vivió durante los tres minutos que estuvo en el cielo y en los que asegura que no sólo vio a Jesús, sino a un bisabuelo (Pop) que no había llegado a conocer, pues murió cuando él todavía no había nacido.

Después el niño revelará otros hechos, que no podía conocer, como el aborto espontáneo que sufrió su madre. La propia Sonja se ha referido a ese dolor interior. La experiencia paranormal de su hijo fue para ella un motivo de sanación.

“Una madre que ha tenido un aborto, bien natural o provocado, vive una pérdida y por supuesto que tiene que pasar por un periodo de duelo, de dolor, sufrimiento, pero deben saber que Jesús se hace cargo de todos estos niños y que están bien allí con él", ha señalado Sonja en su visita a España, en enero del año 2013.

El pastor pluriempleado

El actor Greg Kinnear encarna "sin dogmas ni sermones" a Todd Burpo, el pastor evangélico, bombero voluntario, profesor de lucha grecorromana y propietario y único empleado de una empresa de puertas de garaje, que constituye el principal sostén de su familia.

Greg Kinear aceptó este nuevo reto profesional nada más leer el guión de Randall Wallace, guionista de Braveheart y con quien ya había trabajado en Cuando éramos soldados. "Randall ha evitado toda etiqueta de cine religioso y ha elaborado la historia de manera muy accesible, muy honesta, muy bonita. La historia de una familia".

Interpretar este papel de Todd Burpo no fue nada fácil en una carrera en la que ha tenido que encarnar a numerosos y contradictorios personajes. Nominado al Oscar por encarnar al vecino homosexual de Jack Nicholson en Mejor imposible, fue el heterodoxo padre de Little Miss Sunshine o la narcisista estrella del culebrón en Nurse Betty.

Tenía que hacer de Todd Burpo, un pastor metodista wesleyano, una tradición protestante muy poco dada a visiones, profecías y misticismos que tratará de encajar en su vida los relatos de su hijo. En el libro utilizará como guía la Biblia. En la película se informará mediante Internet, un guiño sin duda para aquellos espectadores incrédulos o sin fe como la psicoanalista a la que acude Todd Burpo.

Lejos del oropel y la fama

El libro fue hace cuatro años un éxito de ventas, con diez millones de ejemplares vendidos en todo el mundo. Ha sido traducido a 35 idiomas. Y su versión cinematográfica no se quedó atrás. En Estados Unidos ha recaudado ya 90 millones de dólares (66 millones de euros), cuando costó 12 (8,7 millones de euros).

Ajenos a ese éxito, los Burpo siguen con su vida en Imperial.” Nosotros somos un hogar normal. Aunque a veces tienes que desconectar" explicó Todd Burpo a "The Christian Post". "Cuando vuelvo a mi vida normal, sigo pastoreando mi iglesia y hago lo que siempre he hecho."

La sencillez y normalidad poco habituales en alguien famoso. Para ellos el cielo ya es real y les conforta y llena de consuelo.