Enlaces accesibilidad

Los militares dan un golpe de Estado en Tailandia

  • El jefe del Ejército toma el gobierno para "restaurar la paz y el orden"
  • El golpe se produce dos días después de que declarara la ley marcial
  • El líder de los "camisas rojas" dice que resistirán en las calles
  • Tailandia vive una grave crisis política desde noviembre de 2013

Por
El Ejército toma el poder en un golpe de Estado en Tailandia

El Ejército de Tailandia ha llevado a cabo un golpe de Estado dos días después de declarar la ley marcial. El jefe del Ejército ha defendido que busca impedir más muertes y una escalada del conflicto entre detractores y simpatizantes del Gobierno tras más de ocho meses de protestas casi diarias en las calles.

"En el interés de la ley y el orden, asumimos los poderes. Por favor, permanezcan en calma y continúen con sus quehaceres diarios", ha dicho el jefe del Ejército tailandés, Prayuth Chan-Ocha, en un anuncio televisado poco antes de las 17.00 horas (12.00 hora peninsular española). El Ejército ha suspendió la Constitución después de tomar el poder y mantienen retenidos a varios miembros del Gobierno.

Prayuth ha tomado el control tras una reunión de las facciones enfrentadas entre sí por el poder: los "camisas rojas", que apoyan a la saga Shinawatra y que en su mayoría es población rural y clase obrera de Bangkok; y los "camisas amarillas", vinculados a la élite política y económica que ha gobernado siempre Tailandia.

Rodeados por otros responsables militares con gesto adusto, Prayuth ha anunciado la asonada después de que en la segunda reunión entre representantes del Gobierno, la oposición y líderes de los manifestantes en el Club del Ejército no se alcanzase acuerdo alguno. Según informa la agencia Efe, los militares retienen a los participantes en dicha reunión.

Poco después del anuncio, el Ejército suspendía la Constitución, declaraba el toque de queda a partir de la noche del jueves y ordenaba a todas las cadenas de radio y televisión que cesaran su programación.

Censura a los medios extranjeros

Además, los militares han prohibido las asambleas públicas y han ampliado la censura a los medios de información extranjeros. Un portavoz militar ha anunciado por los canales locales que queda prohibida toda reunión pública de más de cinco personas, al tiempo que desconectaban las emisiones de medios internacionales como la BBC y la CNN, entre otros, informa Efe.

Las tropas han salido a la calle para desalojar a los manifestantes pro y anti gubernamentales de sus acampadas y obligarles a abandonar las protestas.

Sin embargo, el líder de los "camisas rojas" ya ha advertido que no abandonarán las calles. "¿Lucharéis o no lucharéis? No nos vamos a ningún sitio. No tengáis miedo porque esperábamos esto", ha dicho Jatuporn Prompan. "Lo que tenga que pasar, pasará".

Reacciones internacionales

Por su parte, el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, ha pedido la vuelta inmediata de la democracia a Tailandia y que se respeten a los derechos humanos y las libertades civiles. "Estoy decepcionado por la decisión de las fuerzas armadas tailandeses de suspender la Constitución y tomar el control del Gobierno tras un largo periodo de protestas", ha apuntado el secretario de Estado en un comunicado en el que señaló que "no hay justificación para este golpe de Estado.

Kerry ha exigido la restauración del gobierno civil "inmediatamente, la vuelta a la democracia y el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales, como la libertad de prensa", así como la convocatoria de elecciones anticipadas que "reflejen la voluntad del pueblo", según informa Efe.

En la misma línea se ha manifestado la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, quien ha pedido que se respete la autoridad constitucional del poder civil en Tailandia y se convoquen elecciones lo antes posible tras el golpe de Estado del Ejército. "Los militares deben aceptar y respetar la autoridad constitucional del poder civil, como principio básico de la gobernanza democrática", ha señalado Ashton en un comunicado.

19 golpes de Estado

La grave crisis política que vive el país comenzó en noviembre de 2013, cuando la oposición se lanzó a la calle para pedir la destitución de la primera ministra, Yingluck Shinawatra. Hasta ahora 28 personas han perdido la vida y 800 han resultado heridas en enfrentamientos casi diarios entre partidarios y detractores del Gobierno. Yingluck fue finalmente destituida por el Tribunal Constitucional por un caso de abuso de poder.

El Ejecutivo interino formado tras su destitución tenía previsto convocar elecciones para el 20 de julio, después de que los últimos comicios, celebrados en febrero, tuvieran que ser anulados por el boicot de la oposición. Los antigubernamentales, conocidos como "camisas amarillas", rechazan la convocatoria de elecciones y exigen el nombramiento de un nuevo primer ministro y una reforma del sistema político, que consideran corrupto, antes de concurrir de nuevo a las urnas.

La oposición tailandesa considera que está en la recta final para conquistar el poder tras la destitución de Yingluck, elegida por mayoría en las elecciones de 2010, a quien acusaban de continuar con el sistema político al servicio de los intereses de su hermano y ex primer ministro Thaksin. 

Thaksin Shinawatra fue depuesto por un golpe de Estado incruento en 2006 y condenado en rebeldía en 2008 a dos años de cárcel por corrupción. Actualmente vive en el exilio en Dubai para evitar la condena.

Con esta, los militares han urdido 19 asonadas, 12 de ellas con éxito, desde que acabó la monarquía absolutista en 1932.