Enlaces accesibilidad

Un posible océano de minerales en el centro de la Tierra

  • Detectan un mineral que contiene agua de la corteza terrestre
  • La ringwoodita es muy abundante en las profundidades de la Tierra
  • Tiene implicaciones para el estudio del vulcanismo y la tectónica de placas

Por
El Snaefellsjökull es el volcán islandés que sirvió de puerta de entrada al centro de la Tierra en la novela de Julio Verne.
El Snaefellsjökull es el volcán islandés que sirvió de puerta de entrada al centro de la Tierra en la novela de Julio Verne.

Julio Verne, tal y como describe en su libro Viaje al centro de la Tierra (1864) podría tener razón: existe un océano en el interior de nuestro planeta. Eso sí, no en forma líquida.

El agua podría estar impregnando minerales de la corteza terrestre, en la llamada zona de transición entre los mantos superior e inferior,  a una profundidad de entre 410 y 660 kilómetros.

El mineral, que podría obrar el milagro de contener todo un océano es conocido como ringwoodita, una forma del olivino formado a alta presión y que hasta la fecha solo había podido ser analizado en meteoritos.

Investigadores de la Universidad de Alberta (Canadá), han identificado una muestra de ringwoodita dentro de un diamante hallado en Brasil.

Mineral con alto contenido en agua

Según publica Nature, este mineral contiene un alto contenido en agua. En la muestra estudiada el agua constituía el 1,5% del peso. Al parecer, este mineral es muy abundante en las profundidades de la Tierra, algo así como la totalidad del agua de todos los océanos juntos. 

El hallazgo de la muestra de este mineral tan inusual se produjo en la zona Mato Grosso, Brasil, en 2008 de una forma casi accidental. El diamante fue comprado a mineros locales, pero la inclusión de la ringwoodita no se descubrió hasta los trabajos de investigación, un año más tarde.

Nadie había detectado la ringwoodita anteriormente, pero se sabía que existía

A pesar de que nadie lo había detectado anteriormente, los geofísicos estaban seguros de su existencia. Según los autores, el transporte del diamante a la superficie debió de haber sido extremadamente rápido, posiblemente causado por una erupción volcánica explosiva, alimentada directamente por el magma producido en la zona de transición.

Los científicos han estado profundamente divididos sobre la composición de la zona de transición y si está llena de agua o se trata de un desierto. Saber que existe agua bajo la corteza tiene implicaciones para el estudio del vulcanismo y la tectónica de placas.