El BCE mantiene los tipos en el mínimo histórico y cree que la inflación seguirá baja hasta 2015

• Mantiene la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero, en el 0%
• El BCE prevé un crecimiento y una inflación del 1,1% en 2014
• El Banco de Inglaterra mantiene los tipos en el 0,50%

Draghi: "El uso que han hecho los bancos de esta liquidez era, principalmente, para comprar bonos del Estado"

La última reunión del año del Banco Central Europeo (BCE) no ha deparado grandes sorpresas y el organismo presidido por Mario Draghi ha decidido mantener los tipos de interés en el 0,25%, nivel en el que se colocaron en noviembre. La institución europea ha seguido el guion y también ha dejado inalterada la facilidad marginal de crédito, por la que presta dinero a los bancos durante un día, en el 0,75%.

Asimismo, ha mantenido la facilidad de depósito, por la que remunera el dinero, en el 0%. En la rueda de prensa, Draghi ha admitido que se ha discutido la posibilidad de dejarla en tasas negativas para obligar a circular el dinero y a fluir el crédito, pero ha sido "una discusión breve" en el seno del Consejo.

La mayoría de los analistas, consultados por diferentes agencias de noticias, coinciden en señalar que aunque Draghi es "un hombre de acción", la evolución de la inflación y la mejora de la confianza en la zona euro permiten que se tome un respiro. El banquero italiano ha señalado que el recorte de noviembre "estaba totalmente justificado" y que las directivas de política monetaria "están funcionando bien", aunque sus efectos no son inmediatos.

Al ser preguntado sobre un programa de estímulos, Draghi ha apuntado que "debemos ser muy cuidadosos porque las economías deben estar estructuralmente preparadas para recibir los estímulos y que estos produzcan los efectos deseados". Ha matizado que la agenda de reformas es diferente para cada país y que "una espiral de deuda sin fin no es buena ni para el crecimiento, ni para la equidad".

Menos inflación y más crecimiento

El BCE mantiene su pronóstico de una contracción de la economía del 0,4% para  este año y revisa al alza una décima sus previsiones de crecimiento,  hasta el 1,1%, para el 2014, en comparación con los cálculos de  septiembre. En 2015, prevé que la economía de la zona del euro crecerá un 1,5%.

Con respecto a la inflación, rebaja una décima su evolución hasta el 1,4%, y dos décimas hasta el 1,1% para 2014, frente a las estimaciones de septiembre. Draghi apunta que la inflación se situará previsiblemente en 2015 en una media del 1,3%.

El presidente de la institución monetaria cree que se producirá un "periodo prolongado de baja inflación" y un movimiento al alza "gradual" posteriormente. Draghi explica que en la zona del euro "los riesgos para la evolución de los precios están ampliamente equilibrados a medio plazo".

Los riesgos a la baja para el crecimiento económico son las condiciones del mercado financiero y también los "precios más elevados de las materias primas, una demanda nacional y un crecimiento de las exportaciones más débiles de lo esperado". Asimismo "una implementación insuficiente de las reformas estructurales en los países de la zona del euro" podría influir negativamente en la economía. 

El Banco de Inglaterra mantiene los tipos

Mientras, en Londres, el Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra (BoE) ha decidido mantener sin cambios los tipos de interés en el 0,5%, así como el importe de su plan de estímulos monetarios, que asciende a 375.000 millones de libras (441.175 millones de euros).

El instituto emisor británico mantiene estables los tipos de la libra esterlina desde el 5 de marzo de 2009, fecha en la que también estableció un programa de compra de activos mediante la emisión de reservas, que ha sido ampliado sucesivamente hasta alcanzar su actual volumen en julio de 2012.

La economía británica aceleró su ritmo de crecimiento en el tercer trimestre hasta el 0,8% respecto a los tres meses anteriores, cuando la expansión del PIB fue del 0,7%. La tasa de inflación interanual se situó en octubre en el 2,2%, medio punto menos que en septiembre, mientras que la tasa de paro entre julio y septiembre bajó al 7,6%. En agosto, el Banco de Inglaterra se comprometió a no plantearse una subida al menos hasta que el paro se sitúe en el 7%.