Enlaces accesibilidad

La CE y el BCE defienden en la Eurocámara el "éxito" de los rescates diseñados por la troika

  • Aunque el BCE admite que los países han sufrido costes sociales importantes
  • Los eurodiputados critican la falta de transparencia y legitimidad de la troika
  • Y los fallos a la hora de calcular el impacto de los ajustes en el crecimiento

Por

La Comisión Europea (CE) y el Banco Central Europeo (BCE) han  reivindicado este martes ante la Eurocámara el "éxito", pese a las  difíciles circunstancias, de los rescates diseñados por la troika para Grecia, Irlanda, Portugal, España y Chipre, alegando que la  mayoría de estos países están volviendo al crecimiento y han  corregido buena parte de sus desequilibrios y ganado competitividad.

Los representantes de la CE y del BCE -el otro pilar de la  troika, el Fondo Monetario Internacional, no ha participado- han  defendido su actuación durante una audiencia organizada por la  comisión de Asuntos Económicos del Parlamento, que busca recabar información para redactar un informe no vinculante.

El éxito de los programas es notable ya que han evitado quiebras  desordenadas

Por su parte, los eurodiputados han criticado la falta  de transparencia y legitimidad de la troika, los fallos a la hora de  calcular el impacto de los ajustes en el crecimiento y la falta de  consideración de las consecuencias sociales de los programas.

Mientras, el representante de la  Comisión, Servaas Deroose, ha dicho que "el éxito de los programas es notable, ya que han evitado quiebras  desordenadas, han limitado el contagio y han comprado el tiempo  necesario para crear cortafuegos en la eurozona y en la UE y reforzar  la gobernanza de la zona euro".

"Aunque los programas de ajuste económico han sido difíciles, eran  inevitables. Los países en crisis están ahora en una posición mucho  mejor que hace tres años y los programas evitaron los ajustes más  intensos con consecuencias sociales más graves que se hubieran  producido en su ausencia", ha alegado.

Deroose ha destacado que el crecimiento "está volviendo" y todos  los países sujetos a un programa, con la excepción de Chipre,  registrarán cifras positivas en 2014. La consolidación fiscal "ha  sido impresionante", la competitividad ha mejorado, los sectores  bancarios se han recapitalizado y los Estados rescatados están cerca  de recuperar el acceso al mercado, mientras que España nunca lo ha  perdido.

Los países rescatados han sufrido costes sociales importantes

El representante de la Comisión ha defendido que "el diseño de los  programas fue apropiado en términos generales", aunque ha admitido  que las previsiones económicas no se han cumplido en todos los casos.  Pero lo ha atribuido al alto grado de incertidumbre en el momento de  la crisis, lo que "no debe confundirse con fallos de los programas".

"La corrección de los desequilibrios internos y externos ha sido  más prolongada de lo esperado", ha reconocido Deroose. No obstante,  ha asegurado que los planes de ajuste se han ido diseñando cada vez  más para limitar su impacto en los sectores más desfavorecidos de la  población para atenuar su coste social.

Por su parte, el representante del BCE, Klaus Masuch, ha admitido  que los países rescatados han sufrido costes sociales importantes,  pero los ha atribuido no a los planes de ajuste sino a la crisis  financiera y a los desequilibrios económicos acumulados en los años  previos, entre los que ha citado el crédito excesivo y la burbuja  inmobiliaria en España.

"La buena noticia es que hay luz al final del túnel. Todos los  países sujetos a programas de ajuste económico han realizado  progresos muy significativos a la hora de reducir sus desequilibrios  económicos", ha insistido el portavoz del BCE. "Los programas han  funcionado y han ayudado a crear las condiciones para el crecimiento  futuro", ha defendido.

El modelo de la troika

La decisión de crear este grupo de trabajo sobre la troika partió de los coordinadores de los grupos políticos de la Comisión Económica de la Eurocámara, que podría presentar sus conclusiones en la próxima Conferencia de Presidentes, la reunión de los responsables de las instituciones europeas -Comisión Europea, Parlamento Europeo y Consejo de la UE- que está convocada el 14 de noviembre.

El portavoz económico de la Comisión Europea, Simon O'Connor, ha rehusado pronunciarse sobre la controversia abierta sobre la legitimidad de la troika y las divergencias que aparecen en ocasiones entre sus miembros.

"No voy a entrar hoy en discutir nuevamente el modelo de la troika", ha señado O'Connor, al tiempo que ha recordado que el vicepresidente de la CE y responsable de Economía, Olli Rehn, ha expresado en múltiples ocasiones su punto de vista al respecto: "La troika fue establecida por decisión de los Estados miembros de la eurozona en 2010, con ocasión del primer programa griego" y la "Comisión Europea actúa dentro de este marco".

La troika regresa este martes a Grecia

Precisamente, esta semana la troika ha regresado a Atenas para concluir su revisión del programa de rescate y una vez que ha recibido información sobre el agujero fiscal para 2014.

"Hemos recibido la información el viernes y, como consecuencia, podemos confirmar los planes de viaje [de la troika] y sí, nuestro equipo se encuentra en Atenas para retomar la misión de revisión" del programa de asistencia financiera a Grecia, ha señalado el portavoz comunitario de Asuntos Económicos.

Ha explicado que se trata de información relacionada en buena medida con "temas fiscales", a fin de cerrar la brecha fiscal de 2014, pero también referente a "algunos otros elementos de la condicionalidad" del programa heleno.

Esa información era necesaria para "poder mantener unas conversaciones productivas con nuestros interlocutores en Atenas", ha afirmado O'Connor, quien no ha querido confirmar el monto del agujero fiscal de unos 2.900 millones de euros publicado en algunos medios de comunicación.

Hace un mes, los jefes de misión de la troika y los técnicos abandonaron Grecia para dar tiempo al Gobierno que preside Andonis Samarás para avanzar en ciertas medidas exigidas por la triada.

El primer ministro y su socio de coalición, el socialdemócrata Evángelos Venizelos,  llevan desde el pasado miércoles celebrando reuniones a dos bandas y con otros ministerios para ultimar algunas medidas fiscales y otros de los puntos exigidos por la troika a cambio del próximo tramo de ayuda por 1.000 millones de euros.

Una de las medidas que más fricciones genera dentro del propio Gobierno es la ley que contempla la unificación de los impuestos sobre los bienes inmuebles a partir de 2014, que debería votarse durante la próxima semana.