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China culmina la 'purga' del líder provincial Bo Xilai y acusa a su mujer de asesinar a un británico

  • Le suspende del Comité Central y el Politburó pro "violaciones disciplinarias"
  • Acusa a su mujer de matar a un empresario británico por motivos económicos
  • Los partidarios de Bo ven detrás de estos cargos una vendetta ideológica

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Imagen de archivo de Bo Xilai.
Imagen de archivo de Bo Xilai.

La 'purga' del prometedor líder local del Partido Comunista chino Bo Xilai se ha completado este martes con su suspensión de sus cargos del partido y con la acusación de su mujer, Gu Kailai, del asesinato de un empresario británico, según ha adelantado la agencia oficial Xinhua.

"El camarada Bo Xilai es sospechoso de estar implicado en serias violaciones disciplinarias", ha comunicado la agencia, que ha precisado que la decisión de sacara a Bo del Comité Central y el Politburó del partido ha sido tomado por el liderazgo central de la formación comunista.

El Comité Central es un consejo de 300 miembros de pleno derecho que se reúnen una vez al año mientras que el Politburó es un organismo más poderoso que reúne a dos docenas de miembros del comité.

El periódico oficial del Partido Comunista, el Diario del Pueblo, ha asegurado que tras la suspensión de Bo se prueba que nadie está por encima de la ley y ha acusado al líder provincial de causar un gran daño al país y a su imagen.

"La conducta de Bo Xilai ha violado seriamente las reglas disciplinarias del partido, ha dañado los asuntos del partido y el país y ha dañado seriamente la imagen del partido y el país", asegura el periódico en una copia de su editorial adelantada a Xinhua.

"No hay ciudadanos privilegiados ante la ley y el partido no permite que miembros privilegiados estén por encima de la ley", añade el editorial.

Detención de la esposa

Pero el anuncio más sorprendente es el que se refiere a la esposa del líder de la provincia de Chongqing, a la que Xinhua señala en otra información separada como la principal sospechosa junto a un empleado de hogar de Bo de la muerte del empresario británico Neil Heywood.

"La Policía creó un equipo para volver a investigar el caso del ciudadano británico Neil Heywood, que fue hallado muerto en Chongqing. De acuerdo con los resultados de la investigación las pruebas indican que Heywood murió de homicidio, del que Gu Kailai y Zhang Xiajun son los principales sospechosos", relata la agencia, que se refiere como móvil a "intereses económicos" sin determinar entre Gu y Heywood.

En declaraciones a la BBC, el ministro de Exteriores británico, William Hague, ha subrayado que la muerte de Heywood deve investigarse "en sus propios términos" y "sin tener en cuenta consideraciones políticas".

"Espero que procedan de esa menra y doy la bienvenida al anuncio de que habrá una investigación", ha añadido.

Por lo pronto, Gu Kailai ha sido puesta a disposición judicial, según ha detallado Xinhua.

Crisis interna

Estas dos noticias son los últimos capítulos de un dramático giro de acontecimientos que han provocado la mayor crisis política del Partido Comunista chino desde 1989.

El culebrón político con Bo y su familia como protagonista empezó cuando el pasado mes de febrero Wang Lijun, vicealcalde de la ciudad de la que Bo era alcalde, pidió asilo durante 24 horas en el consulado estadounidense.

La huida de Wang provocó una serie de revelaciones y acusacioens,  incluyendo interrogantes sobre la muerte del empresario británico, cercano a la familia del caído líder comunista.

El Partido Comunista elige nuevo líder a finales de este año y Bo estaba presionando para lograr un alto cargo en el comite más poderoso del partido, dentro del Politburó.

"Esto significa que la carrera política de Bo ha acabado definitivamente", ha asegurado a Reuters Chen Ziming, analista política independiente en Pekin, que ha precisado que la decisión formal de expulsarle debe ser tomada por todo el Comité Central, que debe recibir un informe de la comisión de disciplina interna.

La decisión no supone que Bo sea expulsado del Partido Comunista pero esa posibilidad, junto a que presenten cargos criminales contra él, siguen abiertas si la investigacion sigue adelante.

La comisión disciplinaria que tiene que comunicar su dictamen sobre el comportamiento de Bo es un organismo de élite que aplica las reglas del partido y que investiga a altos cargos acusados de corrupcion y otros abusos.

Sin embargo, al contrario de lo ocurrido en casos anteriores, la destitución de Bo ha tenido desde el principio una dimensión ideológica.

Bien parecido y de cuidada vestimente, Bo llegó a esta ciudad de 40 millones de habitantes del sudeste del país en 2007 y promovió un modelo alternativo de crecimiento más equitativo al generalizado en China.

El líder comunista afirmó que quería reducir las diferencias entre  ricos y pobres, dando esperanza a sus seguidores de que podría implantar  un modelo similar de gobierno populista si entraba en el liderazgo  central del partido.

Su ascenso provocó tensiones ideológicas dentro del partido al  considerar que pretendía reproducir la Revolución Cultural de Mao a  pequeña escala.  Esto ha provocado que sus seguidores desde un principio  vieran los cargos contra él como una conspiración contra sus ideas,   situadas en el ala izquierda del partido.

Los censores chinos han tratado de evitar que se hable del asunto en las redes sociales del país, incluyendo la prohibición de la palabra "Chongqing" pero muchos usuarios han evitado esta medida empleando juegos de palabras y hablando de Bo de forma indirecta.