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Detenido un periodista de The Sun en el marco del escándalo de los pinchazos

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El escándalo que envuelve al conglomerado de Rupert Murdoch, News Corporation, amenaza con extenderse a nuevos medios tras haber sido detenido un periodista de diario The Sun, según informa este viernes The Guardian.

La policía que investiga la polémica ha detenido a un hombre de unos 48 años de edad en relación con los pagos hechos a la policía para que en su momento ocultara los pinchazos.

El arresto ha sido confirmado por un portavoz de News Corporation y dos fuentes de la compañía le han identificado como el reportero de The Sun, Pyatt Jamie. Por su parte, la policía se ha limitado a aclarar que "no se trata de un policía".

Este supuesto reportero, arrestado esta mañana en un domicilio a las afueras de Londres, es el sexto detenido en la operación Elveden sobre corrupción y sobornos a agentes por parte de profesionales de la información.

Doble investigación

Esta investigación fue puesta en marcha de forma paralela a la de las escuchas ilegales -llamada operación Weeting-, que se ha saldado de momento con la detención de decenas de personas que supuestamente participaron en el pinchazo de teléfonos a celebridades y gente corriente para obtener noticias.

La mayoría de detenidos en la operación Weeting son antiguos periodistas del sensacionalista News of the WorldThe Sun es el medio de más tira diaria en Gran Bretaña y, hasta su desparación, el periódico "hermano" de News of the World, que cerró el pasado verano tras verse inmerso en la polémica.

La noticia de esta nueva detención es, sin duda, un duro golpe para este conglomerado que siempre ha mantenido que las prácticas ilegales se habían limitado al medio ya cerrado.

El caso de las escuchas estalló en 2007 con el encarcelamiento del  corresponsal de realeza del rotativo, Clive Goodman, y su socio el  detective Glenn Mulcaire, si bien volvió a la actualidad este año al  descubrirse que la práctica de los pinchazos estaba extendida en el  periódico y que había afectado no solo a famosos, sino a gente corriente  como familias de víctimas de asesinatos o de soldados fallecidos.