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Las erupciones volcánicas submarinas son frecuentes pero pasan inadvertidas

  • Se producen por fisuras en la superficie terrestre situada bajo el nivel del mar
  • Tienen lugar en zonas de alto movimiento tectónico de placas

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Las erupciones submarinas, como la ocurrida este lunes por la mañana en las proximidades de la isla de El Hierro, se producen por fisuras en la superficie terrestre que se encuentra bajo el nivel del mar, pasan inadvertidas y son más frecuentes que las de los volcanes que emiten tierras emergentes, algunos de los cuales tuvieron su origen en el fondo marino.

La erupción del volcán submarino de la isla de Hierro es la primera desde 1971, cuando explosionó el Teneguía, pero en esta ocasión tiene lugar en el fondo del mar.

Los volcanes submarinos suelen pasar desapercibidos, ya que la elevada presión del agua detiene las proyecciones y disuelve los gases, por lo que los signos de erupción no son visibles en la superficie del mar.

No ocurre lo mismo con los volcanes en el fondo de los lagos, que sí se observan en la superficie.

En su mayoría, los volcanes submarinos tienen lugar en zonas de alto movimiento tectónico de placas, también conocidas como dorsales oceánicas.

Los volcanes submarinos más explosivos

Por su relevancia y características, los volcanes submarinos más explosivos se han observado en Tonga, islas Marianas, Islandia, California (EEUU), Hawai (EEUU) y el Monte Marsili (Italia).

El volcán submarino en Tonga, en el archipiélago de Tonga del Pacífico Sur, entró en erupción el 17 de marzo de 2009, a unos diez kilómetros al suroeste de la isla principal de Tongatapu. La erupción, que tuvo su origen en un fuerte maremoto,  fue visible sobre la superficie del mar.

En la conocida Cuenca Norte de Lau, entre Fiyi, Samoa y Tonga, se encuentran decenas de volcanes submarinos activos localizados entre 1.000 y 1.500 metros de profundidad bajo las aguas.

El volcán NW Rota-1, en las islas Marianas (EEUU), ha sido hasta ahora el único lugar del planeta donde se ha observado un volcán submarino directamente en erupción. Las primeras explosiones se detectaron en 2004 y de nuevo se repitieron en 2006.

Lo más característico de este volcán son los diversos animales, algunos nuevas especies, que se han adaptado a un ecosistema difícil para la vida, ya que se nutren de sustancias químicas, tóxicas, pero que paradójicamente son dependientes de las emanaciones volcánicas.

Otros volcanes submarinos

El volcán Eldfell (Montaña de Fuego), en la isla islandesa de Heimaey, entró en erupción el 23 de enero de 1973 y provocó la evacuación de los 5.000 habitantes de la ciudad de Heimaey, antes de quedar sepultada por la lava.

El volcán Morro Rock, en California (EEUU), se encuentra en la bahía californiana del mismo nombre. Fue descubierto en 1542 por el marino portugués Joao Rodrígues Cabrilho. Mide 177 metros de altura y su cima se encuentra sobre la superficie del mar.

Es un referente para los marineros y turistas y la tribu Chumash, que tenía un asentamiento en las proximidades del volcán,  lo consideran un lugar de culto.

El volcán Molokini, en Hawai, es un antiguo volcán. Se encuentra a 5 kilómetros de Maui y parte de su estructura emerge desde el océano.

En forma de media luna, el cono del volcán está coronado por un cráter de 540 metros de diámetro y el extremo norte se encuentra por debajo del nivel del mar.

Junto a estos cinco, se encuentra en Europa el volcán Monte Marsili, en Italia, que es uno de los más grandes.

Hermano del Etna pero en el mar, el Monte Marsili se eleva a 9.800 pies de altitud en el fondo marino del mar Tirreno y según los científicos que lo observan permanentemente, puede activarse en cualquier momento.