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La Casa Real "no tiene previsto" acudir a la boda de Alberto de Mónaco

  • Ha confirmado que ni el rey ni los Príncipes de Asturias asistirán
  • Tampoco está prevista la asistencia de la reina Doña Sofía
  • Alberto de Mónaco y Charlene se casarán este fin de semana

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La casa real española será una de las grandes ausentes en la boda de Alberto II de Mónaco y Charlene Wittstock el próximo sábado 2 de julio, ya que según han confirmado a RTVE.es fuentes de la Casa del Rey," no está previsto" que acuda ningún miembro de la familia real. 

La invitación a la boda monegasca está dirigida a don Juan Carlos por ser el jefe del Estado y, por tanto, la casa real española ha decidido seguir estrictamente el protocolo y, descartada la presencia del rey, aún convaleciente de su operación de rodilla, no ha gestionado otra representación.

"Los príncipes de Asturias no asistirán y el rey no ha recuperado todavía la agenda después de su operación por lo que no es probable que esté en condiciones de ir a Mónaco", han señalado fuentes de la Casa del Rey a RTVE.es, que también han indicado que "no es previsible" que acuda la reina Doña Sofía.

El rey ha llamado por teléfono a Alberto para excusarse por no asistir al enlace, y según el Palacio de la Zarzuela, el príncipe de Mónaco ha escuchado y  comprendido las explicaciones de Don Juan Carlos.

Según marca el protocolo, los invitados a una boda real -o principesca en este caso- deben ser del mismo rango o el inmediatamente posterior al del contrayente que, en esta ocasión, es el jefe del Estado, por lo que "las monarquías europeas deberían enviar también a los jefes de la Casa, a sus máximos representantes", ha explicado a RTVE.es el director de la Escuela de Protocolo de Madrid, Francisco Merino.

Sin embargo, en la boda de Londres, que no era de Estado porque el que se casaba era el heredero del heredero, la casa real española decidió que acudiera la reina acompañada de los príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia.

Algunos medios de comunicación apuntan que la que sí podría estar en Mónaco el próximo sábado es la infanta Pilar, hermana del rey, que acudiría a título personal por la amistad que le une al príncipe Alberto, con el que trabaja en el Comité Olímpico Internacional.

Los otros invitados, desde Sarkozy a Demi Moore

El enlace matrimonial del soberano monegasco con la nadadora sudafricana Charlene Wittstock incluye dos ceremonias, una civil que se celebrará el próximo viernes y otra religiosa, que tendrá lugar el sábado y a la que acudirán miembros de la realeza europea y una nutrida representación del mundo de la moda, el cine y las finanzas.

Entre los primeros nombres de invitados facilitados por el Palacio del Principado monegasco figuran la familia real sueca al completo,  el presidente del Líbano, Michel Sleiman, la presidenta de Irlanda, Mary McAleese y el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso. También asistirá Luis Alfonso de Borbón, en calidad de heredero de un hipotético  trono de Francia.

El presidente francés Nicolas  Sarkozy sí está previsto que asista al enlace, aunque seguramente no con su esposa, Carla Bruni,  que debido a su avanzado estado de gestación podría perderse la boda.

El mundo del deporte estará presente a través de, entre otros, Jacques Rogge, presidente del  Comité Olímpico Internacional, del que el príncipe Alberto es miembro  desde el año 1985; y el presidente de la Federación Internacional del  Automóvil, Jean Todt.

Otros invitados ya confirmados son Demi Moore y su marido Ashton Kutcher, Roger Moore, Mel Gibson y Brooke Shields,  ex de Alberto de Mónaco.  Tampoco faltarán al enlace el diseñador  Karl Lagerfeld,  el modisto de la casa Chanel e íntimo amigo de la  hermana del novio, Carolina y la modelo francesa  Ines de la Fressange.