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El primer ministro japonés renuncia a su sueldo hasta que se solucione la crisis de Fukushima

Tepco pide ayuda al Gobierno para pagar las indemnizaciones    

  • Los evacuados vuelven brevemente a sus hogares para recoger sus pertenencias

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Evacuados de Kawauchi vestidos con trajes protectores recogen sus pertenencias durante una visita de dos horas a su vivienda
Evacuados de Kawauchi vestidos con trajes protectores recogen sus pertenencias durante una visita de dos horas a su vivienda

El primer ministro de Japón, Naoto Kan, ha anunciado este martes que renuncia a su sueldo de primer ministro hasta que se solucione la crisis de la central nuclear de Fukushima. La situación en la planta sigue sin ser controlada y los esfuerzos se centran ahora en devolver la refrigeración al reactor 1, que se espera blindar con placas de plomo o mediante la construcción de un túnel metálico.

Desde el terremoto y el posterior tsunami del 11 de marzo, Kan ha sido acusado de acudir tarde al área siniestrada y de no aportar toda la información sobre las consecuencias del seismo en las centrales nucleares del país.

"Voy a continuar percibiendo mi retribución como miembro del Parlamento, pero no la correspondiente al cargo de primer ministro ni las primas que con lleva", ha declarado Kan en rueda de prensa junto a  los responsables de Tokyo Electric Power (Tepco), compañía operadora de la central. "Al igual que Tepco, el Gobierno tiene una responsabilidad en esta crisis", ha añadido.

TEPCO pide ayuda económica

El anuncio coincide con la decisión del Ejecutivo nipón de ayudar a Tepco a pagar las indemnizaciones a los evacuados de la zona de exclusión en torno a Fukushima. La solicitud formal de ayuda fue realizada por el presidente de Tepco, Masataka Shimizu.

En un gesto para la opinión pública similar al de Kan, Tepco recortará un 50% de los salarios de  los miembros de su consejo de administración, un 25% el de los empleados en puestos directivos y un 20% el del resto de  personal. Shimizu ha indicado que los emolumentos de los directivos  serán recortados aún más y que la organización de la empresa será reestructurada, lo que incluirá posiblemente la venta de acciones.

El Gobierno ha insistido que, aunque la responsabilidad es de la empresa eléctrica, debe asegurarse de que los evacuados reciben su compensación. Las indemnizaciones por la crisis de Fukushima, que ha provocado la evacuación de al menos 80.000 personas en un radio de 20 kilómetros alrededor de la planta nuclear, serán muy elevadas aunque la empresa todavía no ha adelantado una cifra. Algunos expertos hablan de más de 60.000 millones de euros.

En esa misma fecha la eléctrica empezó a distribuir entre los evacuados las solicitudes para reclamar indemnizaciones provisionales. Las compensaciones serán inicialmente de un millón de yenes por familia (unos 8.350 euros) y 750.000 yenes (unos 6.260 euros) para aquellos que vivan solos.

Regreso a casa en Fukushima

También este martes, los habitantes de la localidad de Kawauchi, situada en el perímetro de exclusión en torno a Fukushima, han sido autorizados a regresar brevemente a sus hogares con el fin de  recuperar algunas de sus pertencias y ocuparse de sus animales.

Los vecinos de Kawauchi han sido trasladados hasta su pueblo en autobús y han permanecido allí un máximo de dos horas, equipados con trajes de protección y medidores de radioactividad. Se les ha provisto con bolsas especiales para transportar sus pertenencias, excluyendo animales, líquidos o alimentos. A su regreso a los   albergues, han sido sometidos a un test de radiación.

"No pensaba que iba a estar tan nervioso por poder volver a mi casa",   ha declarado a la televisión japonesa Masao Yanai, que se refugia en  un  gimnasio convertido en refugio al borde de la zona de exclusión.  Además de entrar en sus casas y poder salvar efectos tan personales   como fotos de familia, muchos han podido alimentar a sus animales de compañía y al ganado. Miles de perros, gatos, vacas y cerdos fueron abandonados en la evacuación tras el accidente nuclear.