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La lucha por Extremadura entre el barón Fernández Vara y Monago, con un PP renovado

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Es la primera vez que el socialista Guillermo Fernández Vara y José Antonio Monago se miden en las urnas por la presidencia de la Junta de Extremadura. En las anteriores elecciones autonómicas, en mayo de 2007, Vara consiguió la mayoría absoluta frente a Carlos Floriano, el predecesor de Monago como líder del PP extremeño. Sin embargo, en esta ocasión y si los electores votan según han contestado a las encuestas, Vara puede no tenerlo tan fácil como en las últimas elecciones.

Según la última encuesta del CIS,  el PP obtendría la victoria al lograr 32 escaños, aunque podrían no ser suficientes para gobernar si PSOE (31 escaños) e Izquierda Unida (2 escaños) alcanzan un acuerdo que permitiría al actual presidente, Guillermo Fernández-Vara, seguir en el poder.

Un barón socialista fuerte

La crisis económica y la gestión que de ella ha hecho el Gobierno socialista nacional han situado al partido en uno de los peores momentos de su historia, lo que ha llevado al presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, a anunciar que no será candidato en las presidenciales de 2012.

Sin embargo, Fernández Vara es uno de los barones socialistas al que la crisis ha castigado menos y al que las encuestas vaticinan que se mantendrá en el poder, aunque el PP recorta la distancia.

Tanto es así que su nombre llegó incluso a barajarse como uno de los posibles sucesores de Zapatero, aunque ya ha descartado que vaya a presentarse al proceso de primarias que se abrirá en el partido. 

Nacido en Olivenza (Badajoz) en 1958 en el seno de una familia conservadora y pudiente, se afilió a las juventudes de Alianza Popular, según él, por razones más personales que ideológicas.

Desde mayo de 2007 gobierna uno de los feudos más seguros del PSOE y abandera la devolución de competencias a la Administración central en la gestión del agua o partes de la sanidad y la educación

Aunque algunos de los líderes locales del PP le reprochan no haber conseguido librarse del influjo de Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha abierto su discurso a las clases medias y, en las últimas autonómicas, sumó dos diputados regionales más a la habitual mayoría absoluta.

Monago al frente de un PP renovado

Monago es el nuevo líder del PP extremeño desde noviembre de 2008, cuando fue elegido candidato a la presidencia de la Junta con el 90% de los votos de los compromisarios asistentes al X Congreso regional del PP.

La nueva cara del partido llega con un equipo renovado donde la media de edad de los candidatos no llega a los 40 años

Este pacense de Quintana de la Serena comenzó su carrera política con tan solo 19 años afiliándose a las juventudes del partido. El líder de los populares extremeños aboga sobre todo por reducir los impuestos.

Reforma del Estatuto bajo consenso

Uno de los logros más destacados de esta legislatura es el nuevo Estatuto de Extremadura, que las Cortes Generales ratificaban el pasado 19 de enero, casi un año y medio después de que la Asamblea regional lo enviara al Congreso de los Diputados.

Si por algo se ha caracterizado toda su tramitación parlamentaria ha sido por el consenso, tanto en la Asamblea de Mérida como en las Cortes Generales.

Se trata de una reforma que proporciona más autogobierno a Extremadura pero sin debilitar las capacidades estatales, según reconocen desde ambos partidos.

No debilita al Estado, sino que lo refuerza

“No debilita al Estado, sino que lo refuerza”, afirmaba Monago, quien añadía que “está hecho a la medida de España”.

El reto: la lucha contra el paro

El próximo presidente extremeño deberá entrenarse a fondo para hacer frente a uno de los principales problemas que tiene la región: el desempleo.

Aunque uno de los principales objetivos que Vara se planteó en 2007 era incrementar el número de empleos, la crisis económica no ha favorecido el cumplimiento de su promesa.

En concreto, en Extremadura hay 31.500 ocupados menos que en aquel año y la tasa de paro se sitúa en el 24%, con 142.022 desempleados; según los últimos datos correspondientes al mes de marzo. Unas cifras que sitúan a la región por encima de la media nacionaldonde la tasa se sitúa en el 20,5%.

Los dos grupos más afectados por la falta de trabajo en Extremadura son las mujeres, porque suponen un 60% del total de desempleados de la región, y los jóvenes, un sector que acababa con una tasa de desempleo del 33,3% a finales de 2010, la mayor de toda España.

Mucho trabajo es el que tiene por delante el próximo presidente aunque, por el momento, habrá que esperar hasta las elecciones del 22-M para comprobar si, de nuevo, es Fernandez Vara el que toma las riendas de la región o si, por el contrario, José Antonio Monago logra hacerse con el poder en Extremadura tras 28 años gobernada por el PSOE.