Enlaces accesibilidad

La TV canadiense muestra evidencias de que Hizbulá mató al ex primer ministro Hariri

  • El reportaje cita comunicaciones interceptadas de los autores del crimen
  • Los investigadores de la ONU habla de indicios "abrumadores"
  • El líder de la milicia se niega a que ninguno de sus seguidores sea juzgado
  • Se teme que una orden detención reavive el conflicto civil en el país

Por
Estudiantes libaneses llevan pancartas pidiendo verdad ante un edificio de Beirut.
Estudiantes libaneses llevan pancartas pidiendo verdad ante un edificio de Beirut.

Investigadores de la ONU han descubierto que miembros de la milicia chií prosiria Hizbulá estuvieron detrás del asesinato en 2005 del ex primer ministro libanés Rafik al-Hariri, según ha adelantado la televisión pública canadiense CBC en un reportaje que cita fuentes de la investigación y documentos internos.

El trabajo de los periodistas canadienses apuntan que las pruebas reunidas por la Policía libanesa y más tarde por los investigadores de la ONU "apuntan de manera abrumadora a que los asesinos procedían de Hizbulá".

Hizbulá forma parte del Gobierno de unidad nacional liderado por el hijo de Hariri, Saad, y ha negado en ocasiones reiteradas cualquier implicación en el asesinato.

Su líder, el jeque Nasralá, advirtió este mes que no permitiría el arresto de ninguno de los miembros de su grupo.

Hizbulá no ha querido hacer comentarios sobre el informe de CBC News, mientras que el portavoz de la ONU, Farhan Haq, ha confesado que conocía el informe pero no ha querido comentarlo por ahora.

Acusación inminente

Hizbulá y diplomáticos occidentales esperan que haya una acusación en firme contra miembros del grupo a finales de este año o a comienzos del próximo. Mientras, los políticos libaneses temen una crisis y una posible vuelta a la violencia si esa acusación se produce.

Según la información de CBC News, la clave de la investigación está en las comunicaciones interceptadas a través de teléfonos móviles.

"Lo que los analistas británicos les mostraron -a los investigadores de la ONU- no era otra cosa que un escuadrón de la muerte llevó a cabo el asesinato", asegura la cadena canadiense.

Líbano ha acusado a dos empleados de la compañía estatal de telefonía móvil Alfa de espiar para Israel en los últimos meses.  Los arrestos son parte de una investigación más amplia que ha llevado a más de 50 detenciones desde abril del año pasado.

Hizbulá insinúa que Israel podría haber usado a estos agentes para manipular pruebas como conversaciones en teléfonos móviles que implicarían a la milicia en el asesinato de Hariri.

Posible conflicto civil

Por este motivo, el grupo liderado por Nasralá, que mantuvo una guerra contra Israel en 2006, ha acusado al tribunal de la ONU de ser una herramienta israelí y a sus investigadores de enviar información al país hebreo.

La investigación había implicado en un principio a altos cargos sirios y libaneses aunque más tarde no desveló los detalles de su hallazgo. Saad Hariri, por su parte, culpó a Siria del asesinato de su padre pero más tarde aseguró que estaba equivocado y que su acusación fue motivada políticamente.

El asesinato de Hariri colocó al Líbano en su peor crisis desde la guerra civil que duró entre 1975 y 1990.  Las tensiones entre suníes seguidores de Hariri y los chiíes de Hizbulá amenazaron con estallar en una guerra civil.

El reportaje de CBC apunta en la misma dirección a otro publicado por la revista alemana Der Spiegel en 2009, quecita información supuestamente obtenida de los investigadores que creían que Hizbulá estaba detrás del asesinato.