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Los trabajadores de Metro Madrid seguirán el miércoles la huelga salvaje sin servicios mínimos

  • Han ratificado la decisión en una asamblea celebrada este martes al mediodía
  • Los paros de 24 horas han dejado a dos millones de usuarios sin metro

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Los trabajadores del Metro dicen que los servicios mínimos son abusivos

La 'huelga salvaje' sin servicios mínimos en Metro Madrid seguirá este miércoles. Los trabajadores han ratificado en asamblea esta mañana la tercera jornada de paros de 24 horas "sin el cumplimiento de los servicios mínimos" del 50% que ha fijado el Gobierno regional.

El portavoz de CC.OO. en Metro, Ignacio Arribas, ha informado de que los 2.500 empleados - de un total de 7.500 trabajadores- reunidos este mediodía en una asamblea han decidido "por unanimidad" y "sin presión" seguir con los paros, que afectan a dos millones de personas que utilizan el suburbano a diario, sin respetar los mínimos.

"Los trabajadores están convencidos de que hay que continuar así", ha asegurado Arribas, que no prevé que en las próximas horas se reconduzca la situación que hoy impide a millones de madrileños desplazarse en Metro.

Metro de Madrid ha cerrado poco después de las 6.00 horas del martes todas sus estaciones por el incumplimiento de los servicios mínimos de la huelga que ha dejado sin trenes a los usuarios, que han sido desalojados mientras esperaban en los andenes. La Consejería de Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de  Madrid ha decidido cerrar las instalaciones debido a los  piquetes que han impedido la salida de los convoyes en la segunda jornada de huelga.

"Metro de Madrid informa que con motivo del incumplimiento de los  servicios mínimos establecidos no se presta servicio en toda la red de  metro. Rogamos abandonen las estaciones", señalaba por megafonía el  surburbano pasadas las 6.00 horas.

La mayor parte de los viajeros que pretendían utilizar el Metro a primera hora de la mañana no sabían que la intención de los sindicatos era incumplir los servicios mínimos, lo que les ha ocasionado importantes trastornos a la hora de volver a casa o de asistir a su puesto de trabajo.

Las líneas afectadas son todas las de Metro de Madrid y la línea 1 de Metro Ligero, según ha confirmado un portavoz de la Consejería de Transportes. Desde la Comunidad se recomienda coger los autobuses de la EMT y los trenes de Cercanías que tienen "capacidad de reacción" y podrán aumentar los viajes y frecuencias de sus líneas.

Los sindicatos hablan de "éxito"

Los secretarios generales de UGT y CC.OO. en Metro de Madrid, Teodoro Piñuelas e Ignacio Arribas, han calificado de "éxito" la huelga en el Metro de Madrid, que mantiene cerradas sus estaciones por decisión de la Consejería de Transportes de la Comunidad.

"El seguimiento ha sido total, no está saliendo ningún tren", ha confirmado Arribas, en una jornada de huelga en la que, según Piñuelas, no se ha producido ningún incidente y en la que los piquetes "son más informativos que nunca", porque los trabajadores, ha agregado, "no necesitaban más argumentos para secundar los paros".

Ambos dirigentes han afirmado que la jornada se ha iniciado como tenían previsto y han recordado que avisaron de que los trabajadores no garantizaban los servicios mínimos. Teodoro Piñuelas ha añadido que le parece bien el cierre "hasta que se llegue a un acuerdo", hasta que, han expresado ambos, se respete "lo acordado en el convenio". "Desde el comité de huelga seguiremos en contacto con la dirección para cerrar el asunto satisfactoriamente", han manifestado

"Huelga total" por unanimidad

La asamblea de trabajadores de Metro de Madrid acordaba "casi por unanimidad" en la noche de este lunes que no respetarían los servicios mínimos del 50% establecidos por la Comunidad de Madrid -que sí se han seguido en la primera jornada de paro-, por lo que la huelga paralizaría el metropolitano madrileño el martes y el miércoles, afectando a unos dos millones de usuarios cada día.

Los sindicatos sostienen que es una "ilegalidad" que la Comunidad rebaje salarios negociados en un convenio, tal y como se establece en la Ley de Medidas Urgentes aprobada este lunes en la Asamblea regional madrileña.

La primera de las tres jornadas de paro convocadas por los sindicatos del Metro de Madrid ha logrado un seguimiento del 100% de los 7.500 empleados de la empresa pública madrileña, según las organizaciones sindicales, y del 38%, según la Comunidad de Madrid.

Un problema muy gordo

El consejero de Transportes ha hecho un llamamiento al "sentido común" a los trabajadores, a quienes ha advertido de que si no cumplen los servicios mínimos, se pueden encontrar con un "problema muy gordo".

"Espero que, aunque sea sólo por el respeto al usuario, los trabajadores de Metro y, fundamentalmente, los sindicalistas de Metro sigan manteniendo los servicios mínimos durante todo el tiempo que dure la negociación", afirmaba este lunes el consejero responsable de Transportes en la comunidad, algo que no se ha cumplido.

La Ley de Medidas Urgentes aprobada modifica los Presupuestos de 2010 y traspone el decreto del Gobierno central para la reducción del déficit público. Con ella, en la nómina de junio se bajará cerca de un 5% el sueldo de los empleados públicos, un 17% el salario de la presidenta regional respecto al establecido en el Presupuesto de la Comunidad de 2008, y un 12% en el caso de los vicepresidentes y consejeros regionales.

Trastornos para el medio ambiente y los pasajeros

Esta segunda jornada de huelga entra en conflicto con los consejos de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento de Madrid, que han recomendado usar el transporte público debido a que una masa de aire procedente de África podría ocupar la atmósfera de la región.

"Tenemos que coger un avión dentro de unas horas y tenemos que marcharnos hacia el aeropuerto. No hay forma de llegar. Ahora nos va a trocar coger un taxi y pagar mucho dinero", manifestaron a Europa Press unas ciudadanas portuguesas que pretendían coger el metro en la estación de Sol.

Otra mujer se acercó, visiblemente indignada, a los agentes de seguridad del metro y les preguntó: "Ahora, ¿cómo llego yo a trabajar?".