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Encuentran el cadáver de Laura Alonso, desaparecida el lunes en Ourense

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Encuentran el cadáver de Laura Alonso

Los equipos de búsqueda han encontrado el cadáver de Laura Alonso, la joven desaparecida en la madrugada del pasado sábado cuando salió a tomar algo con sus amigos, en el ayuntamiento orensano de Toén, en la misma zona donde el pasado miércoles apareció su chaqueta, cerca de un cortafuegos, según informan fuentes del servicio de emergencias 112.

Su cuerpo fue hallado por un guardia civil que formaba parte de una patrulla que rastreaba la zona en la que se había encontrado la chaqueta de la joven, según han informado a Efe fuentes de la Subdelegación del Gobierno.

Tras el macabro hallazgo, los agentes de la Guardia Civil han establecido un cerco de seguridad en la zona para evitar que se puedan borrar pruebas importantes para esclarecer este suceso, indicaron las mismas fuentes.

El cadáver ha sido levantado por orden del juez a las 21.25 horas, según ha informado el coordinador del dispositivo de búsqueda, el teniente de la Guardia Civil, Javier Martín. Hasta el lugar se han desplazado familiares de Laura Alonso, que han identificado el cadáver..

Martín ha explicado que el cuerpo aparentaba llevar "unos días" en el lugar y que fue el olor que desprendía lo que ha ayudado a descubrirlo, ya que esta oculto entre la maleza.

El lugar del hallazgo está situado en el monte del municipio ourensano de Toén, a unos tres kilómetros de la zona en la que había sido encontrado el coche de la víctima y entre cinco y seis kilómetros del sitio en el que fue recuperada su chaqueta.

Por su parte, el teniente de alcalde de Toén, Roberto Lloves, ha señalado que el hallazgo se realizó en una zona de difícil acceso y que las diligencias para proceder al levantamiento del cadáver pueden tardar unas horas.

Amplio dispositivo de búsqueda

En su búsqueda se han empleado equipos de buzos de A Coruña, que han rastreado alcantarillas y pozos, aunque en un principio no han tenido éxito.

Su cuerpo ha aparecido apenas un día después de que apareciera su chaqueta en una cuneta en el mismo municipio. A esta prueba se une el coche, encontrado en una pista forestal, y el teléfono móvil, hallado en los alrededores de la escuela municipal.

El hecho de que estos objetos hayan aparecido en puntos muy distantes entre sí, ha dificultado las tareas de rastreo y ha forzado a ampliar el perímetro de búsqueda.

En total, más de un centenar de personas han formado parte del dispositivo para la búsqueda en tierra y por el río Miño.