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Violento y peligroso encierro de Jandilla

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Peligroso cuarto encierro de los Jandilla

Los toros de Jandilla han realizado un peligrosísimo encierro protagonizado por una res que ha quedo descolgada a la altura de la plaza del ayuntamiento, creando situaciones de peligro.

Capuchino, el más pequeño de la manada, un toro colorado de 515 kg, se ha descolgado del grupo, realizando el resto del recorrido en solitario y dejando a su paso numerosos heridos. El encierro se ha dado por concluido en cuatro minutos y medio.

Según el último parte médico, han sido atendidos 4 corredores por asta de toro; uno de los cuales falleció tras ser corneado en el cuello. Cruz Roja ha informado de otro corneado en el abdomen en el tramo de Mercaderes y dos en el tramo de Telefónica; uno de ellos, con herida en el muslo, londinense de 21 años que asistía a los Sanfermines por segunda vez.

La manada ha enfilado agrupada la cuesta de Santo Domingo en la que Capuchino ya ha tomado la delantera golpeando a uno de los corredores. A su paso por la plaza Consistorial, Capuchino ha protagonizado el incidente de la jornada, enfilando hacia el vallado de la derecha y embistiendo a varios mozos.

El toro colorado ha realizado el resto del recorrido unos 25 metros por detrás del grupo. Superada la curva de Telefónica, el astado se ha dado la vuelta alargando el encierro mientras el resto de sus compañeros ya estaban en la plaza.

En este tramo se han registrado nuevos incidentes, con al menos dos heridos por asta de toro. Los pastores han tenido que emplearse a fondo.

El hierro Jandilla, habitual en los Sanfermines, es sinónimo de velocidad y peligro. Ostenta un triste record del año 2004, con 8 corneados y más de 80 heridos.