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El clérigo conservador Khatami afirma que los "alborotadores" deberían ser ejecutados

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Un influyente clérigo conservador iraní alineado con la línea dura del presidente Ahmadineyad ha pedido que se ejecute a los "alborotadores". Es el último signo de la determinación de las autoridades por frenar las protestas de la oposición contra las elecciones del pasado 12 de junio mientras el Consejo de Guardianes ha descartado que se cometiera fraude en los comicios "más sanos" desde 1979 y el G-8 pide el "cese inmediato" de la violencia.

Ahmad Khatami, que es miembro de la Asamblea de Expertos, ha afirmado que quiere que los tribunales "castiguen a los líderes de las revueltas firmemente y sin mostrar ningún tipo de piedad para dar una lección a cada uno de ellos", según informa Reuters.

Según la ley islámica, cualquiera que se enfrente a la estado islámico debería ser condenado como "mohareb", es decir, como aquel que hace la guerra contra Dios. "Ellos deben ser condenados sin piedad y ferozmente". En Irán, la pena para las personas condenadas como "mohareb" es la ejecución.

El clérigo ha acusado también a los medios extranjeros de provocar las manifestaciones tras las elecciones presidenciales del pasado 12 de junio, que la oposición ha denunciado por fraudulentas, según recoge AFP.

"Los medios americanos, europeos y británicos han mostrado su perversidad en esta historia", ha afirmado el imán en la oración del viernes que ha dirigido en Teheran y que ha difundido la radio estatal.

Más control de la prensa

Khatami les ha acusado de "echar aceite al fuego" y ha hecho un llamamiento para que el gobierno controle a los periodistas. "¿Cómo es posible que se pasearan por el país con sus portátiles, sus teléfonos por satélite para provocar a la gente?"

Las autoridades iraníes ya han impuesto fuertes restricciones a la prensa extranjera, que tiene prohibido cubrir las manifestaciones de la oposición y grabar vídeos o sacar fotografías.

Al menos 20 personas han muerto en las protestas de los últimos días. La televisión estatal iraní informó el jueves de que ocho miembros de las milicias basij, que están reprimiendo las manifestaciones, fueron asesinados por los manifestantes.

Este viernes, los seguidores de Mousaví soltarán miles de globos en recuerdo de Neda, la joven que se ha convertido en símbolo de las protestas tras ser asesinada.