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Condenado a 18 años de cárcel por matar a su novia a la que aplastó hasta asfixiarla

  • Los hechos ocurrieron en octubre de 2006 en Jaén en el domicilio donde convivían
  • El acusado la empujó sobre la cama, se colocó encima de ella y la asfixió
  • En Valladolid un jurado declara culpable a un hombre de matar a golpes a esposa
  • En Valencia, piden 8 años para una mujer que acuchilló a su marido cuando la golpeaba
  • Si eres mujer maltratada busca asesoramiento en el teléfono gratuito 016

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La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén ha condenado a Martín J.O. a 18 años de prisión por la muerte de su novia, Rocío Estepa, el 12 de octubre de 2006 en Jaén.

Según la sentencia, el juez, de conformidad con el veredicto del jurado, lo condena a la pena de 18 años como "autor de un delito de asesinato con la atenuante de arrepentimiento -por confesión- y la agravante de parentesco".

La sentencia considera hechos probados que el acusado convivía con la joven maestra sevillana de 29 años que daba clases en un colegio de la provincia de Jaén, en una vivienda del Puente Tablas, un barrio residencial jiennense, cuando discutieron en el dormitorio del inmueble. La riña fue subiendo de tono con insultos entre ambos y en un momento dado el acusado la empujó sobre la cama, se colocó encima de ella y la asfixió.

Posteriormente, el acusado, de nacionalidad argentina, bajó al sótano de la vivienda con la intención de quitarse la vida sin conseguirlo, por lo que llamó a continuación a un abogado amigo suyo a quien le comunicó que había matado a su novia, y a indicación de este cogió el coche y se presentó en la Comisaría de la Policía de Jaén donde comunicó lo sucedido.

Culpable en Valladolid de matar a golpes a esposa

Por otra parte, un jurado popular ha declarado culpable de asesinato al acusado de matar a su esposa a palos y de una puñalada en el corazón, ya que ha considerado que actuó con alevosía, sin que ella pudiera defenderse, aunque no con ensañamiento.

La Audiencia Provincial de Valladolid ha acogido la vista oral por hechos ocurridos el 29 de octubre del año pasado en la población vallisoletana de Pedrajas de San Esteban y en la que el fiscal ha pedido 20 años de prisión, igual que la abogada del Estado y las acusaciones particulares. Mientras, la defensa ha pedido una pena de 15 años de prisión.

El jurado ha considerado probado que el procesado, Jesús G.R., de 61 años, y su esposa, Lidia S.D., de 58 años, mantenían una convivencia deteriorada a lo largo del tiempo y que, a pesar de compartir su casa, la relación era prácticamente inexistente.

La esposa del acusado pidió la separación a su marido a principios de 2007, una solicitud que repitió pocas horas antes de su muerte, sin que el encausado lo admitiera, lo que desencadenó una discusión. Entró en la casa, se dirigió a un dormitorio donde su mujer se estaba secando el pelo, cogió un palo y la golpeó en la cabeza reiteradamente. La persiguió por la casa hasta llegar a la cocina, donde continuó golpeándola, cayó al suelo y el procesado la clavó entonces un cuchillo en el corazón.  

Piden cárcel para una mujer que acuchilló a su marido cuando la golpeaba

Por último, en un juicio celebrado en la Audiencia de Valencia, el Ministerio Fiscal ha pedido ocho años y nueve meses de prisión para una mujer que le clavó un cuchillo en el abdomen a su marido cuando éste iba golpearla con un ladrillo, hechos por los que la acusación pública pide también tres años y medio de prisión para el hombre por cuatro delitos de maltrato.

Según el fiscal, antes de que se produjera esta agresión mutua, el acusado, K.J., de nacionalidad marroquí, había maltratado a su mujer en al menos tres ocasiones.

El 26 de marzo del pasado año, después de haberla golpeado por la tarde, el hombre regresó al domicilio de ambos, en Massalaves, y comenzó a forcejear de nuevo con ella porque ésta quería separarse, cayendo los dos por la escalera del rellano.

Minutos más tarde, unos amigos del marido avisaron a la mujer de que el acusado quería prender fuego a su coche, y ella salió a la calle con el cuchillo que estaba utilizando para cortar patatas. El hombre la tiró al suelo y le pegó patadas y puñetazos, y cuando se disponía golpearla con un ladrillo la mujer le clavó el cuchillo en el abdomen.

Según la calificación provisional del fiscal, lo hizo "con la intención de matarlo", porque se lo clavó en una zona "donde sabía que había órganos vitales" y lo hizo con "intensidad". La mujer ha asegurado que ni se dio cuenta de como le clavó el cuchillo porque su marido "no paraba" de pegarle y "tenía mucho miedo".