Los manifestantes en Bosnia se declaran dispuestos a todo para que dimita el Gobierno
- Protestan contra la corrupción y las altas cifras de paro
- Han dimitido 4 de los 10 gobiernos cantonales por las manifestaciones
- Son las peores movilizaciones desde que acabó la guerra en 1995
Miles de manifestantes bosnios han pedido la dimisión del gobierno en distintas localidades del país, en el sexto día consecutivo de protestas en Bosnia Herzegovina, las mayores movilizaciones desde que acabó la guerra en 1995. Las protestas están resultado pacíficas después de los violentos disturbios registrados la semana pasada, en la que los manifestantes atacaron la sede de la presidencia.
En la capital de Bosnia, Sarajevo, y en otras ciudades del país, miles de manifestantes han pedido la dimisión del gobierno de la Federación de Bosnia, una de dos administraciones semiautónomas del país, que comprende a los croatas y bosnios musulmanes. Las manifestaciones, que se iniciaron la semana pasada, son una reacción contra la corrupción y la alta tasa de desempleo en el país.
En Sarajevo, varios cientos de manifestantes se han movilizado ante la sede de la Presidencia portando pancartas en las que se podía leer: "No han estado robando de nosotros durante 20 años y ahora eso se acabó", o " Los tribunales y la policía están protegiendo a las autoridades".
Los congregados han coreado lemas como "ladrones fuera", "queremos leyes" o "dimisiones", y han bloquedado al tráfico unas de las principales arterias de la capital, informan los medios de comunicación locales. Varios miles más se congregaron en otras ciudades.
"Si tenemos que tener una guerra, que así sea", ha comentado a Reuters Fehim Lovic, un veterano de guerra de 58 años que ha dicho explica cómo tiene que mantener a sus tres hijos con un subsidio por desempleo de 50 markas bosnios, unos 25 euros. "Estoy dispuesto a limpiar las calles sin cobrar un solo centavo durante dos años, si ese es el precio que tengo que pagar por un nuevo y mejor estado ", ha añadido.
Dimisiones en 4 de los 10 gobiernos cantonales
Ante el miedo a que las tensiones sigan aumentando los partidos gobernantes del ente croata-musulmán, el SDP y el SDA, han propuesto adelantar las elecciones generales, previstas para octubre próximo. El SDP socialdemócrata ha indicado este lunes que si los otros partidos rechazan un adelanto electoral, el alto representante de la comunidad internacional, Valentin Inzko, debería hacerlo.
El líder del nacionalista SDA, Bakir Izetbegovic, coincidió con sus socios de coalición al decir que "en esta situación, elecciones anticipadas son la única opción". Desde el inicio de las protestas, han dimitido ya los gobiernos de cuatro de los diez cantones que forman el ente croata-musulmana.
El último, que se produjo durante la noche de este domingo, fue el del controvertido primer ministro del cantón de Bihac, Hamdija Lipovaca. Por otro lado, el actual presiente bosnio de turno, el croata Zeljko Komsic, aseguró que dimitiría si se lo piden los ciudadanos.
Paro y corrupción
Estas son las mayores movilizaciones civiles en el país desde el final de la guerra de 1992-1995. Las protestas se originaron el pasado miércoles en Tuzla (noreste) y han extendido a otras 33 ciudades, entre ellas, Mostar, Bihac y Zenica. El origen se encuentra en el cierre de varias fábricas industriales en Tuzla tras su privatización pero, también, en rechazo a la corrupción y protesta por la gestión del Gobierno la difícil situación económica y laboral del país.
Según informa Reuters, el 25% de la población activa del país está sin trabajo, aunque la cifra podría ascender al 45% si se contabiliza a las personas que trabajan en la economía sumergida.
La administración del estado de Bosnia Herzegovina es compleja. Como consecuencia de los acuerdos que pusieron fin a la guerra, el nuevo estado bosnio surgió con una estructura descentralizada y dividida en dos entidades nacionales: una para uno para los serbios (República Sprska) y otra para croatas y musulmanes (Federación de Bosnia-Herzegovina).
Esa situación ha fomentado la creación de un complejo maquinaria administrativa y burocrática que ha restado agilidad y eficacia a la administración pública y crea un caldo de cultivo para la corrupción en el país. "La situación de tensión se ha ido acumulando durante años, pero ha terminado estallando", ha llegado a admitir el presidente de la parte croata de Bosnia, Zeljko Komsic. "Es todo nuestra culpa. No sé si el poder estatal podrá funcionar, pero deberá hacerlo".
Una llamada de atención
La ONU ha hecho este lunes un llamamiento a los manifestantes para que protesten de "manera pacífica". "El secretario general (Ban Ki-moon) está al tanto de los disturbios que están teniendo lugar en Bosnia y de manera general llama a los manifestantes a protestar de manera pacífica", ha asegurado ante la prensa el portavoz de la ONU, Martin Nesirky.
El analista Srecko Latal ha explicado a Efe en Sarajevo que el movimiento de protestas bosnio "ocurre porque en 20 años las autoridades no han aprendido a comunicarse con los ciudadanos". "Cualquier comunicación termina después de las campañas electorales. El poder no escucha las exigencias ciudadanas, ni a los que viven en pobreza, lo que ha causado la ira", ha señalado el experto del International Crisis Group.
Los violentos disturbios registrados la semana pasada, en los que varios manifestantes violentos atacaron varias sedes gubernamentales, ha llamado la atención de los ministros de la Unión Europea y se han llegado a producir algunas peticiones de que se revise el sistema político-administrativo y el reparto de poder en Bosnia.
Lo que ha ocurrido en Bosnia es una llamada de atención”, comentó el ministro de Exteriores británico, William Hage. “ Tenemos que focalizar mayores esfuerzos en ayudar a Bosnia para que se dirija hacia la UE, hacia la pertenencia a la OTAN. el estancamiento de la política y el gobierno bosnio pueden llegar a su fin, y creo que es
va a ser una cuestión importante en la próximo mes ", añadió
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