Bienvenid@s a un bosque habitado por niños pastores convertidos en biólogos conmovidos.
Dice Jaime Izquierdo, autor de "La casa de mi padre", que "fue a partir del verano de 1959 cuando el campo español comenzó a partirse en dos. Aquel 21 de julio de aprobó el Plan de Estabilización con el que dimos paso al conocido “milagro español” entre comillas. Lo cierto es que generó más paro y mandó a la emigración a cientos de miles de españoles. La industrialización borró de un plumazo la memoria campesina del país al desmantelar cientos de pequeñas culturas locales que las comunidades rurales habían ido construyendo con la transmisión oral de los siglos y que no tenían más registro de la propiedad que la palabra"...
"Topónimos, lenguas, instituciones vecinales, razas ganaderas antiquísimas, figuras de derecho consuetudinario, conocimientos y procesos agroecológicos, variedades agronómicas, especies silvestres, comunales, mercados agroalimentarios de proximidad, microsistemas complejos de gran diversidad biológica… fueron arrasados en pocos años".
No obstante, está en nuestro poder y nuestra responsabilidad potenciar a algunas mujeres y algunos hombres buen@s y sabi@s que pueden unir los dos tiempos. El pasado con sentido común (que nos aguarda en algún rincón de nuestra memoria atávica) y el presente cargado de futuro con todavía más sentido común. Como apunta Jaime Izquierdo en su libro “La conservación cultural de la naturaleza”, de KRK Ediciones.
Hoy nos acompaña un gran hombre soriano que de niño fue pastor trashumante y que llevaba en el zurrón libros para ilustrarse y sacar notable de media para conseguir una beca y convertir su sueño en realidad: llegar a ser primero biólogo, después profesor e incluso político. Y nunca abandonó su sueño. A Manuel Gómez Ceña le conocimos en una de las asambleas de Montes de Socios de Soria, de la mano admiradora de Pedro Agustín Medrano Ceña. Manuel nos hablará de ovejas, de bajar a extremo, de pastores al servicio de un amo, de las jornadas de trashumancia, de camas improvisadas junto al ganado, de careo, de migas, de ordeño… pero, sobre todo, de la vida que un día tuvo sentido, cuando no existía ni la necesidad, ni la palabra concienciación.
Y nos concienciamos con el zurrón bien cargados de textos ilustrados de Gustavo Duch, Fernando González Bernáldez, Ignacio Abella, Jaime Izquierdo, Arantza Leal Nebot, Joaquín Araújo, Raúl de Tapia que es Raúl Alcanduerca, Juan Mercado y el mismísimo Miguel Cervantes con el primer discurso feminista de la historia publicado en “El Quijote” en boca de la pastora Marcela. Además estrenamos sección “La cobertura del bosque”, con David Gutiérrez Ferreiro de la Red Cántabra de Desarrollo Rural. Todo ello acariciado por la voz de Angélique Kidjo y la compañía de Natxo Blanchart (Ntx Bla Lo), Rosa Villalba y Mar Verdejo Coto de la Comunidad del Bosque.
Club de la Hojarasca, hoy integrado por Eduardo Sanz, Pilar Socorro, Carolina Alba Castro Estévez, Julio Valverde, Isabel Ruiz Lara, Elena Vázquez y Gema Trigueros Fernándezos.
Y ahora ponte las botas de sembrar caminos con antiguas semillas cargadas de futuro, échate el zurrón con toda tu conciencia verde a la espalda y coge el cayado que une el cielo con la tierra y todas las éticas vivas del paisanaje… Porque estás entrando en tiempo de trashumancia… Sin duda, territorio conmovido… ¡Arriba Las Ramas!
