El vuelo 4230 de UM Airlines se estrelló cerca del aeropuerto de Trebisonda (Turquía) el 26 de mayo de 2003 con 75 personas a bordo, de las cuales 62 eran militares españoles.
Un miembro del equipo de rescate camina junto a lo que ha quedado del fuselaje del Yak-42.
Apenas dos días después del accidente, los féretros de los 62 militares fueron repatriados a España para que estuvieran presentes en el funeral de Estado. De ellos, 30 iban mal identificados.
Los ataudes fueron cubiertos por la bandera de España.