El croata Marcelo Brozovic y el francés Antoine Griezmann pugnan por un balón.
Así formaron los jugadores franceses y croatas, junto con el trío arbitral, al inicio de la final del Munsial de Rusia.
El jugador alemán Philipp Lahm y la modelo rusa Natalia Vodianova fueron los encargados de llevar la Copa del Mundo al estadio.