Panama Beach ha sido una de las localidades más afectadas por el paso del huracán, que atravesó la zona con categoría 4 y vientos de hasta 250 kilómetros por hora.
El gobernador de Florida, Rick Scott, ha advertido de las consecuencias mortales del potente huracán, que traserá "una devastación inimaginable".
Los fuertes vientos han derribado varios árboles a su llegada a la localidad floridiana.