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Atlético 0-0 Real Madrid | Análisis

Cuando el miedo puede más que la necesidad

  • El empate sin goles deja a Atlético y Madrid a diez puntos del Barça, el líder
  • Los dos equipos volvieron a mostrar falta de puntería en momentos decisivos
  • Griezmann pasó desapercibido y recibió una gran pitada del público al ser cambiado
  • Cristiano y Benzema tampoco dieron el paso adelante que necesitaba el Madrid

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Griezmann y Cristiano durante el derbi disputado en el Metropolitano.
Griezmann y Cristiano durante el derbi disputado en el Metropolitano.

El primer derbi disputado en el Wanda Metropolitana no pasará a la historia y solo será recordado por eso, por ser el primer choque entre Atlético y Real Madrid. Ambos equipos llegaban en un momento muy irregular y con la necesidad de sacar una victoria tras el triunfo del Barça en Leganés, pero el miedo pesó más que los once puntos de razones para ganar.

Al final, el miedo de ambos por no perder el partido y enfrentarse a las críticas posteriores les ha pasado una factura que les deja en la misma situación, a diez puntos del club azulgrana, que saca sus compromisos incluso sin estar en el mejor momento de juego. Ahora, la liga se pone muy cuesta arriba, con solo 12 jornadas disputadas.

Se esperaba una paso adelante de los dos y eso fue lo que hizo el Atlético en los primeros compases de la noche, utilizando como argumento una presión alta que impedía salir cómodo a un Real Madrid que no está en su mejor momento de elaboración de juego.

Ahí se dio el primer momento decisivo del derbi, cuando a los cuatro minutos de juego Correa dispuso de la mejor ocasión de toda la primera mitad para haber puesto por delante al Atlético, en un mano a mano con Casilla que no fue capaz de solventar. Ese gol hubiese cambiado todo el devenir del partido. Esta acción evidenció lo que es un hecho, este Atlético no tiene gol, para un equipo al que le cuesta generar esas ocasiones claras es clave no fallarlas cuando se dan.

Esa buena actitud de los rojiblancos se fue disipando, quizás contagiados del tedisoso juego desplegado por el Real Madrid. Los blancos tocaban y tocaban sin profundidad, lo que dejaba al Atlético en una situación muy cómoda en defensa. El equipo de Simeone sí ha encontrado el equilibrio en la faceta defensiva y si enfrente hay un equipo que no da profundidad a su juego ni velocidad, pues es difícil que les pongan en un aprieto.

Isco, el único argumento del Real Madrid

El único argumento del Real Madrid se llamaba Isco, el jugador español y quizá de la Liga que más en forma se encuentra en la actualidad. Pero un solo jugador, por muy bien que esté y que no se llame Messi, tiene las cosas muy complicadas para él solo decidicir un choque tan complicado. El malagueño se ofreció constantemente por el interior izquierdo, desbordó acompañado de Marcelo y fue el único que puso los detalles de calidad en una noche donde el espectáculo brilló por su ausencia.

Y si Marcelo tuvo buenos momentos en ataque los estropeó con su labor defensiva. Está bien que le dé profundidad a la banda izquierda y que ponga en superioridad ante el rival, pero está mejor saber cuándo volver a cerrar los espacios que se dejan, sobre todo, si hay un hombre veloz como Correa esperando a tu espalda. No hubo daños mayores porque el argentino no supo interpretar su función.

Aunque sin duda, hubo tres hombres sobre los que recaía la repsonsabilidad de animar el derbi y echar el picante de la noche: Antoine Griezmann, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema. Pero niguno estuvo a la altura de lo requerido y volvieron a mostrar esa línea plana que les acompaña desde prácticamente el inicio de la Liga.

Griezmann, pitado y muy cuestionado

El delantero del Atlético parece tener la cabeza en otro lugar, como demuestra cada vez que viaja a Francia y es entrevistado por un medio de su país, donde se deja querer constantemente por otras 'novias', como si por obra divina sus devaneos no fuesen a llegar a oídos de su afición, desu entrenador y de sus compañeros, en definitiva, a su actual familia rojiblanca, como bien declaró Simeone tras el empate.

"A mí me enseñaron que los que son de mi familia, hasta el día en que están en la familia, a muerte con ellos". Veremos qué pasa cuando el galo ya no esté en la familia 'colchonera' y tras los pitos recibidos en el Metropolitano tras ser sustituido, el divorcio parece cada vez más cercano. De ser un intocable a ser uno más, su bajo rendimiento le ha llevado a ser sustituido hasta en cinco ocasiones esta temporada, cuando los partidos aún no estaban resueltos. Solo lleva tres goles entre Liga y Champions y el último lo realizó el 26 de septiembre en la derrota europea ante el Chelsea.

En lo que a Real Madrid se refiere, Cristiano y Benzema debían dar un paso al frente y no lo hicieron. El portugués mostró más predisposión y se dejó ver más que el francés, pero empieza a dar síntomas de que lo mejor que tenía ya lo ha dado, sin discutir, que le queda fútbol aún en su pierna derecha para seguir dando alegrías al madridismo, aunque parece que el 'The Best' no le ha sentado muy bien. Está falto de velocidad y con las ideas poco claras. Pasó la mayor parte del partido volcado a la derecha, como en sus inicios en el Manchester United y suya fue la última ocasión de la noche, pero esa falta de velocidad que está mostrando fue clave para que Lucas llegase a cortar sus disparo ante de que Oblak se viese en apuros.

Sin excusas

Y sin en alguien se está confiando por encima del resto es en Benzema, que por enésima vez no aportó ni gol ni asistencias decisivas. Siempre se dijo que era el mejor complemento de Cristiano, pero la conexión entre ambos ya no es la misma. A falta del gol, al menos se espera de Benzema ese juego entre líneas que desequilibre a la defensa rival, pero tampoco está fino en esta faceta, habrá que ver cuánto sigue durando la paciencia de Zidane con su compatriota.

Precisamente, el entrenador del Real Madrid dijo tras el derbi que solo les había faltado el gol, pero que habían jugado bien: "Nos ha faltado el gol, no tengo que reprochar nada a mis jugadores, hicimos un gran partido y merecimos más pero no se ha podido".

Las declaraciones de Zidane pueden llegar a entenderse al inicio de la temporada, cuando todavía el equipo está en rodaje, pero tras 12 jornadas y a diez puntos del eterno rival, habiendo fallando ante equipos como el Levante o el Betis y mostrando una pésima imagen ante el Tottenham. La desconexión entre Modric y Kroos está agravando esta situación.

Está claro que el actual campeón de Europa ha perdido la velocidad de crucero que le llevó imponerse al Manchester United en la Supercopa de Europa y al Barcelona en la Supercopa del España al inicio de temporada.