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Balonmano femenino

El Rocasa, campeón de la Copa de la Reina tras derrotar al Bera Bera en la prórroga (26-27)

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El Rocasa se hace con la Copa de la Reina en la prórroga

Ficha técnica:

26 Super Amara Bera Bera: Temprano, Etxeberria (5), Ana Isabel Martínez (8,2p), López (1), Ederra (2), Aramendia (2) y Sans (2) -equipo titular- Alba Menéndez (2), Ezkurdia (2) y Elorza (2).

27 Rocasa Gran Canaria: Silvia Navarro, Tiddara (3), María González, Almudena (4), Melania Falcón (6), Hamciuc (1) y Lissandra Luson (6) -equipo titular- Dara (ps), Luján (7,1p), Yacaira, Arabia, Bintou, Arinegua y Mbengue.

Marcador cada cinco minutos: 

4-1, 6-4, 8-5, 9-6, 12-8, 15-10 (descanso); 18-14, 20-17, 20-20, 20-22, 22-23, 24-24; 24-25; 26-27.

Árbitros: 

Jesús y Jorge Escudero Santiuste (colegio Cantabria). Excluyeron a Sans y Etxeberria (2) por parte del Bera Bera, y a María González y Almudena por parte del Rocasa Gran Canaria.

Incidencias: 

Partido correspondiente a la final de la XXXVIII edición de la Copa de la Reina de balonmano disputado en el pabellón municipal de O Porriño ante unos 1.800 espectadores.

El Rocasa Gran Canaria se proclamó campeón de la Copa de la Reina después de derrotar en la prórroga de la final al Super Amara Bera Bera (26-27), en un partido en el que fue decisiva la actuación de la joven portera Dara Hernández, quien entró en la segunda parte cuando su equipo perdía por cinco goles (20-15).

El Bera Bera dominó el partido hasta ese momento. Su excelente defensa, amparada en una gran Ana Temprano, y las numerosas pérdidas de balón de su rival en el ataque posicional facilitaron el juego a las chicas de Montse Puche, que llegaron al descanso con una clara ventaja de cinco goles (15-10).

Una cómoda renta con la que jugaron hasta el minuto 37 (20-15), pese a que en el arranque del segundo tiempo el Rocasa había solventado sus problemas ofensivas. Entonces, el técnico insular, Antonio Moreno, decidió sentar a la portera internacional española Silvia Navarro y meter en pista a la joven Dara.

Dos paradas suyas consecutivas despertaron a su equipo, que se enchufó en defensa. Poco a poco, empezó a limar su desventaja hasta lograr dar la vuelta al marcador tras un parcial 1-8 en dieciséis minutos (20-21). El choque se había convertido en un duelo personal entre las porteras Dara y Temprano.

El Bera Bera, demasiado agotado y sin rotaciones por las lesiones, continuó atascado en ataque y su rival dispuso de hasta dos ataques para ponerse tres arriba. Lo evitó una sensación Ana Temprano. Y un exclusión de Almudena hizo daño a las insulares (23-23, min.56).

A partir de ahí el intercambio de golpes fue continuo, incluso en las dos partes de la prórroga, aunque siempre con el Rocasa mandando. A falta de menos de dos minutos Almudena Rodríguez puso el 26-27. El Bera Bera dispuso de un último ataque para forzar los penaltis pero erró su lanzamiento.